Razer cuenta con uno de los ultraportátiles de mejor diseño y potencia, el Blade Stealth, pero hasta ahora incluía una pantalla de 12.5 pulgadas 1080p o 4K. Ahora ha optado por mantener el mismo diseño de chasis y cambiar la pantalla por una de 13.3 pulgadas con una resolución de 3200 x 1800 píxeles, que es la misma proporción 16:9, pero dispone de bastante menos marcos.
La pantalla es de tipo IGZO con reproducción de color mejorada que cubre el 100 % de la gama de color sRGB con un brillo de 400 nits. El chasis es de aluminio CNC de mayor resistencia y calidad, en color gris metalizado en vez de el habitual negro, con teclado retroiluminado RGB con anti toques fantasma. La opción de procesador es un Core i7-7500U, 16 GB de RAM LPDDR3-1866, y hasta 1 TB de SSD de tipo PCIe.
Dispone de salidas HDMI 2.0a, un Thunderbolt 3, y dos USB 3.0, con wifi 802.11 ac y Bluetooth 4.2. El tamaño sigue siendo igual, 321 x 206 x 13.1 mm, y un peso de 1.33 kg. Puede utilizar tarjetas gráficas externas a través de la conexión Thunderbolt 3, como la caja Core que tiene en su catálogo la misma Razer.
El precio de partida es de 1399 dólares por el modelo con 256 GB de almacenamiento.
Vía: AnandTech.