Los últimos signos del apocalipsis de la llegada de los procesadores Coffee Lake de sobremesa se siguen sucediendo, y en esta ocasión combino dos en la misma noticia —para intentar que no se haga demasiado pesado hablar siempre de lo mismo—. La primera de ellas hace referencia al supuesto rendimiento del Core i7-8700K en Cinebench R15.
En la prueba mononúcleo el procesador tendría una puntuación de 196 cb, 5 puntos por encima del Core i7-7700K de acuerdo a los datos de la web Guru3D. En multinúcleo alcanzaría los 1230 cb, que sería un 28 % más que el Core i7-7700K. Cinebench R15 se beneficia menos de los núcleos lógicos adicionales, pero aun así no parece que sumar un 50 % más de núcleos vaya a traducirse en una mejora del rendimiento del 50 % en todos los programas y situaciones. Al fin y al cabo, se dice quel Core i7-8700K va a tener 3.7 GHz de frecuencia base en vez de 4.2 GHz, y un turbo de 4.4 GHz en vez de 4.5 GHz, aunque ganaría a cambio un turbo para uno y dos núcleos de 4.7 y 4.6 GHz.
Por otro lado, un tuit de Gigabyte con una imagen apuntaba a la llegada de nuevas placas base el 5 de octubre. Lo pongo en pasado porque el tuit ya ha sido borrado, y en el que se podía leer «Intenta adivinar qué es esto», con la fecha en formato inglés 10.5.17, «rendimiento al límite».