Siempre hay bastante polémica en las decisiones que toma Apple respecto al iPhone, pero generalmente el tiempo les da la razón. Aunque no fuera el primero en quitar el conector de 3.5 mm de sus teléfonos con el iPhone 7, cuando lo hizo Apple surgieron todo tipo de críticas hacia la compañía, y más de una puyita. Incluso de Google, que en la presentación del Pixel el año pasado dijo que «incluso tiene un conector de audio».
Pero Google ha decidido prescindir en el Pixel 2 de ese conector de 3.5 mm y en su lugar incluye en la caja del teléfono un adaptador de USB tipo C a 3.5 mm. Pero si se te pierde, tendrás que comprarle uno nuevo por 20 dólares. Sin embargo, el adaptador de Lightning a 3.5 mm de Apple cuesta bastante menos, 9 dólares. Para poder escuchar música en el Pixel 2 y recargarlo a la vez, la única opción por ahora es un adaptador de Moshi de 44.95 dólares, mientras que para iPhone hay un adaptador de 3.5 mm más Lightning de 35 dólares.
No me quejo de este cambio. Todo lo contrario, ya que me parece una necesidad que las compañías del sector del sonido abracen todas la era del audio digital. Pero costará conseguirlo. Con lo que no suelo estar de acuerdo es que una empresa, por hacer una gracieta y contentar a sus fanáticos, se burle de otra en este tipo de cosas. Samsung lo ha ido haciendo cada vez menos, por fortuna. Pero cuando una compañía se ríe de una característica de un iPhone, termina imponiéndose en el sector. Léase «lector de huellas», «ausencia de Flash», o «eliminación del conector de audio». Incluso el precio.
Vía: The Verge.