Las empresas estadounidenses se piensan que lo que es normal en las leyes de su país pueden llevarlo a otros países sin mayores problemas. Uber es la empresa que más se está dando cuenta de este error de concepto de los estadounidenses. En EE. UU. esta compañía y otras similares fueron reguladas bajo su propio tipo de empresa, una compañía de redes de transporte en lugar de como empresas de transporte de pasajeros. Pero la Corte de Justicia de la Unión Europea le ha dado un buen bofetón a Uber a este respecto.
A partir de ahora, Uber es considerada según el fallo del tribunal como una empresa de transporte como lo son las de taxis, y por tanto se tendrá que regir para operar en los países de la Unión Europea a las leyes de cada país al respecto. Uber aseguraba que ellos solo sirven de intermediario entre los usuarios y los conductores de vehículos privados, pero la Corte de Justicia que esa intermediación solo es una parte del servicio en su conjunto, «derivado de la actividad normal de un servicio de transportes y, no se puede clasificar a la empresa como un servicio de la sociedad de la información».
Este caso llegó a los tribunales europeos a raíz de la denuncia de la asociación de taxis de Barcelona debido a considerar que operaban en competencia desleal al no ser considerados taxis. Aunque la postura en España es bastante más peliaguda ya que actualmente opera bajo una licencia de vehículos de turismo de alquiler con conductor (VTC), si algún gobierno decidiera acabar con Uber ahora ya tendría el respaldo legal europeo para ello.
Vía: Ars Technica.