La próxima tecnología de pantallas a suceder a las OLED es la de los microledes. Integran una mejor iluminación por píxel como las OLED, pero mantienen una calidad como las pantallas IPS y sin el desgaste de los píxeles que se produce en las OLED. Es la tecnología que se lleva tiempo que Apple tiene muy avanzada, y en parte sería gracias al apoyo de socios como TSMC. Esa tecnología hace que cada píxel tenga en torno a los 10 µm, y por tanto hay bastantes problemas relacionados con sus tecnologías de fabricación.
Ahora Bloomberg indica que Apple estaría diseñando y produciendo por sí misma este tipo de pantallas desde unas instalaciones de fabricación secretas en Santa Clara, cerca de su sede de California. El proyecto tendría el nombre de T159, bajo la supervisión de Lynn Youngs, la cual ayudó a desarrollar las pantallas táctiles para los iPhone e iPad originales. La superficie que ocupa esta instalación sería de 5800 metros cuadrados, con 300 ingenieros diseñando y produciendo las pantallas en estos momentos.
La inversión que estaría haciendo Apple en la tecnología de microledes sería enorme, con la intención de marcar una diferencia con respecto a su competencia. Otras ventajas adicionales que tendrían los microledes sería un menor consumo y un menor grosor respecto a las pantallas OLED, lo que permitiría usarlo para reducir el grosor de sus productos.
Se está hablando de que el primer producto en utilizarlo sería en una nueva generación de su reloj, aunque no sea en breve y todavía podría tardar un par de años en tenerlo listo. La compra de LuxVue en 2014 —una empresa dedicada al desarrollo de pantallas de microledes— y el probable uso de otra fábrica perteneciente a Qualcomm en Taiwán son algunos de los indicios entre otros muchos de que Apple está invirtiendo fuertemente en este sector.
Vía: The Verge.