Tanto Nvidia como AMD mantienen en el mercado tecnologías de refresco adaptativo para los monitores, y el año pasado anunciaron una segunda versión de G-SYNC y FreeSync con motivo de la llegada de los monitores con imágenes de alto rango dinámico (HDR). G-SYNC HDR y FreeSync 2 son los necesarios para que entren en juego al reproducir contenido en HDR, y en el caso del monitor EX3203R de BenQ la compañía asegura que dispone de HDR.
Analizándolo un poco más, indica que solo tiene un brillo promedio de 300 nits y color de 8 bits, cubriendo un 90 % de la gama DCI-P3 usada en televisión y contenido audiovisual. Se queda lejos del 97 al 99 % de los monitores profesionales usado para ellos, por lo que se puede tratar más bien de monitor generalista y con seudo-HDR. En estos casos, hasta que no se prueba no se sabe si realmente el HDR integrado aporta mejora o no.
El panel de 31.5 pulgadas es de tipo VA con resolución de 2560 × 1440 píxeles, una curvatura de 1800 R. Dispone de contraste estático 3000:1, y puede llegar a los 400 nits en momentos puntuales de la reproducción de contenido HDR. Tiene un refresco de 144 Hz, por lo que servirá bien en juegos, un tiempo de respuesta de 4 ms, tiene reducción de luz azul y tecnología antiparpadeos.
Dispone de dos conectores HDMI 1.4 con HDCP 2.2, un DisplayPort 1.2, dos puertos USB 3.0, y un USB tipo C compatible con DisplayPort 1.2, datos USB 3.0 y carga de hasta 10 W —para usar el monitor con un teléfono con USB tipo C, porque para un portátil se seguirá necesitando el cargador; una pena que no dé al menos 60 W—. Se puede ajustar su altura hasta 60 mm y regular su inclinación entre –5º y 20º, contando con marcos mínimos de pantalla.
Vía: Guru3D.