El mundillo de los teléfonos con pantalla plegable no ha empezado con buen pie ya que las compañías han intentado apresurarse para ponerlos a la venta sin tenerlos totalmente listos. El caso más sangrante ha sido el de Samsung, cuyo Galaxy Fold tuvo que ser retrasado sine die debido a los problemas detectados por los críticos que lo recibieron días antes de su puesta a la venta.
Samsung ha llegado a decir que anunció el Galaxy Fold antes de que estuviera listo, pero que ha mejorado el proceso de prueba de los dispositivos, poniendo dos mil unidades a una batería de test mucho más intensa. Con ello, espera haber cubierto todas las situaciones para que no se repitan los problemas encontrados por los críticos, que incluían cosas como el retirar la capa de protección de la pantalla, o la introducción de suciedad por la zona de pliegue que podía deformar la pantalla, entre otros problemas.
Ahora, la compañía ha indicado que se pondrá finalmente a la venta en septiembre, y ha indicado los cambios realizados al diseño del teléfono. La capa de protección de la pantalla se ha hecho más grande para cubrir también el marco de la pantalla para hacer evidente que se trata de una parte integral de la misma.
También han añadido refuerzos en las zonas de pliegues para evitar que entre suciedad al dispositivo sin afectar a su capacidad plegable. Eso afecta a las bisagras, añadiendo capas de metal para mejorar la protección de la pantalla, y se ha reducido el espacio que quedaba entre las bisagras y el cuerpo del móvil. Sea como sea, este lanzamiento sufrirá un escrutinio por parte de los críticos para comparar el antes y después.
Vía: 9to5Google.