Intel se durmió en los laureles bajo el liderazgo de Brian Krzanich, que llegó a ser el director ejecutivo de la compañía en 2013 tras llevar en la compañía desde los 80, y su inoperancia ha dado nueva vida a AMD a la vez que está lastrando a Intel en multitud de aspectos, incluida la capacidad de producción. Bob Swan, el actual director ejecutivo y que no es ingeniero, debe tomar decisiones duras, y entre ellas ha estado el anuncio de que recurrirán a fundiciones de terceros para producir algunos de sus procesadores. Pero esa decisión está teniendo y tendrá daños colaterales.
La compañía ha anunciado de momento una reestructuración —una más— de su organigrama poniendo especial atención a lo que tiene que ver con el apartado de ingeniería. El actual director de Ingeniería, Murthy Renduchintala, sale de la compañía tras dividir su división, el Grupo de Cliente, Aquitectura de Sistemas y Tecnología, en cachos para que se centren en el cometido que tendrán asignados en lugar de tener una visión monolítica en el diseño y producción de procesadores.
Intel ha tenido que retrasar la llegada en masa de los procesadores fabricados con su proceso de 7 nm debido a un problema de producción detectado. Siendo vital que la compañía llegara a tiempo a los 7 nm, este retraso a desembocado en el uso necesario de fundiciones de terceros como TSMC para producir algunos de sus chips y a esta reorganización.
La división que dirigía Murthy Renduchintala pasa a descomponerse en las divisiones de Desarrollo de Tecnología; Operaciones y Fabricación; Ingeniería de Diseño; Gráficos, Software y Arquitectura; y Cadena de Suministro. Algunos grupos también buscarán a nuevos líderes, mientras que otros permanecerán como es el caso de Raja Koduri. La división de Desarrollo de Tecnología estará al cargo de desarrollar los procesos litográficos, dirigida por Ann Kelleher, que lleva en Intel desde 2008, y ha supervisado la mejora reciente en la producción de chips a 10 nm.
Vía: AnandTech.