Intel ha anunciado finalmente la serie Core de 14.ª generación que está compuesta básicamente por refritos de la generación anterior. Sube ligeramente las frecuencias en los modelos, y algunos equivalentes a la generación anterior les sube el número de núcleos E. La mejora de rendimiento es entre el nuevo Core i9-14900K respecto al Core i9-13900K es mínima, aunque afortunadamente la compañía mantiene el PVPR de 589 dólares.
Ese precio se mantiene en los Core i5-14600K y Core i7-14700K, lo cual hace que este último, que añade cuatro núcleos E para un total de doce además de las frecuencias ligeramente subidas, sea la única mejora real en precio-núcleos de estos Core de 14.ª generación. La mejora de frecuencias hace que el 14900K alcance los 6 GHz. Lo mismo se aplica a las versiones sin iGPU: 14600KF, 14700KF y 14900KF. Mantienen el consumo normal de 125 W y el máximo de 253 W.
No hay nada nuevo en estos procesadores. Usan las mismas placas base serie 600 y 700 previa actualización del BIOS, la misma memoria DDR5-5600 y DDR4-3200 antes de recurrir a perfiles de memoria de los módulos o la sobrefrecuencia manual. En esta situación, Intel compara el rendimiento que extrae el 14900K en jugeos frente al Ryzen 9 7950X3D, y obviamente de media es mejor en la selección elegida por la compañía, aunque tampoco por mucho.
La única mejora que habría es que asegura que son compatibles con Thunderbolt 5, aunque no dice de qué forma, si desde el propio procesador o usando un chip distinto en la placa base que es lo más probable. También incide en que la compatibilidad de estos procesadores con los módulos de RAM de más de 8000 MHz es máxima y la mejor del mercado. Unos módulos que no terminan de llegar, son caros, y muchas veces no aportan una mejora de rendimiento real.