Análisis: Corsair A115 review en español, refrigeración por aire de máximo rendimiento

Aunque muchos presuponen que la refrigeración líquida tiene siempre mejor rendimiento térmico que una por aire, no tiene por qué ser así. Las mejores refrigeraciones por aire del mercado pueden proporcionar unas buenas temperaturas con los mejores procesadores, incluso el Core i9-14900K de Intel cuyo consumo en carga completa se sitúa en los 253 W. Para esos procesadores se precisan refrigeraciones como la A115 de Corsair, que prescinde totalmente de la iluminación para centrarse en las temperaturas, aunque no sea un bloque de refrigeración barato con su PVPR de 115 euros.

Videoanálisis

Desembalado y características

La refrigeración A115 de Corsair llega en la habitual caja con estética en colores amarillo y negro que usa la compañía para sus productos. Es una caja de buen tamaño. Sus características están detalladas en uno de los laterales, lo cual incluye el peso total del conjunto, que es de 164.8 mm × 153 mm × 155 mm (al. × an. × pr.) y 1.59 kg. En la parte inferior de la caja se indica todo el contenido de la misma.

Al abrir la caja se verá un pequeño libreto de garantía y otro de conformación y seguridad. Tras quitar una tapa protectora se verán tres cajas, una grande en el centro que contiene la refrigeración en sí, y otra más a cada lado. Una de ellas incluye un ventilador adicional, y la otra toda la tornillería y enganches necesarios para montar esta refrigeración en placas base LGA1150, LGA1151, LGA1155, LGA1156, LGA1200, LGA1700, AM4 y AM5.

En la caja de extras se incluye todo lo necesario para montar esta refrigeración en las placas base de AMD e Intel. Para las primeras se aprovecha la placa trasera que incluyen de serie, mientras que para las segundas se proporciona una placa trasera de distancia variable. Para cualquiera de ellas se incluye un juego de cuatro tornillos de soporte, dos alas y cuatro tornillos moleteados para fijarlas. También se incluyen los clips y los tornillos para instalar el segundo ventilador.

Esta refrigeración por aire está hecha en color negro y se compone de dos bloques de aluminio atravesados por seis caloductos de seis milímetros de diámetro. Eso ya es un indicativo de que es de alto rendimiento. La parte inferior de la refrigeración tiene preaplicada pasta térmica XTM70 de Corsair, de la mejor del mercado de su tipo, en un patrón hexagonal y protegida por una tapa de plástico.

Entre los dos bloques está premontado un ventilador AF140 Elite de Corsair, y el otro ventilador habrá que montarlo con lo incluido en la caja de extras. Se puede montar un tercer ventilador, pero las piezas de montaje se tendrán que comprar por separado. La altura de la refrigeración de 164.8 mm es para la posición por defecto. Los ventiladores tienen margen para subirlos más debido a un sistema de raíles que incluyen, por lo que puede ser más.

Montaje

El montaje de la A115 es bastante sencillo y está pensado para que los ventiladores se puedan mover fácilmente arriba y abajo. Pero debido a ello, el ventilador de en medio está en la altura mínima, por lo que si se pone a la altura adecuada para maximizar el flujo de aire, entonces la refrigeración pasa a tener una altura de unos 180 mm, por lo que ciertamente no entrará bien en cualquier caja salvo que sea una de buen precio.

Como es habitual, el montaje lo he hecho en una H7 Flow de NZXT que admite un disipador de hasta 185 mm de altura, por lo que no he tenido problema a la hora de montarlo. Pero antes de comprar esta refrigeración hay que tener muy en cuenta que la altura de 165 mm indicada por Corsair no es realista para sacarle el máximo provecho a la A115.

Lo primero a montar es el segundo ventilador que va en el bloque de disipación frontal. Por si no se ve bien el ventilador de en medio, ese es en el que no va sujeto ese ventilador. Corsair los llama clips pero son monturas para los raíles que están a ambos lados del disipador. Se sujetan al ventilador con cuatro tornillos, y luego solo hay que deslizarlo por los raíles.

Al mover el ventilador se notará que los raíles están graduados con muscas y que cada una tiene cierta retención, pero no hay que hacer mucha fuerza para ajustar la altura. Es un sistema que me parece muy práctico, aunque una vez instalada la disipación tampoco es que haya muchos motivo para mover los ventiladores. Pero es un sistema bien pensado y que no añade casi sobrecoste a la refrigeración.

Una vez puesto el ventilador, el proceso de instalar la refrigeración es muy sencillo. La he instalado en una placa base con zócalo LGA 1700 de Intel, por lo que solo hay un paso adicional, que es en realidad el primer paso. Hay que coger la placa trasera de la refrigeración, la cual es un poco especial para poderse usar en este zócalo y los LGA 115X y 1200.

En cada esquina de la placa trasera hay una zona deslizante con el agujero de soporte, así como dos muescas. Cada zona habrá que ponerla, en mi caso para el LGA 1700, en la más exterior. Se mueve fácilmente haciendo un poquito de fuerza pero se queda bien en su sitio. Es un sistema que también me parece muy bien pensado y que simplifica el montaje.

Una vez situada la placa trasera en la placa base, se ponen los cuatro tornillos de soporte. A continuación hay que coger las dos alas poniendo la curvatura mirando hacia afuera, y situando una arriba del procesador y otra abajo, en lugar de lo habitual que es a derecha e izquierda. Luego ya solo hay que quitar la tapa de plástico del bloque de refrigeración, alinearlo con los tornillos de las alas metálicas, y atornillarlos. Para eso hay que quitar el ventilador central, y es un momento en el que puede que hay que tener un poco de tino y mover ligeramente la refrigeración para empezar a atornillar, pero no es problemático si se monta en la placa base antes de ponerla en el PC.

Lo que resta por hacer es conectar los ventiladores a la placa base, para lo cual se incluye un bifurcador de cables de cuatro pines, por lo que solo se precisa de un cabezal de este tipo en la placa base, el habitual para la CPU. Van a quedar los cables un poco largos, por lo que recomendaría recogerlos con una brida.

Por último, siempre recomiendo instalar la refrigeración en la placa base antes de ponerla en la caja, en caso de que se pueda. Tampoco será complicado ponerla, aunque debido a su tamaño hay que poner primeramente los cables de los ventiladores y el de la alimentación de la propia placa base porque el tamaño del bloque de disipación puede hacer complicado ponerlos a posteriori en algunas cajas si no tienen margen suficiente por arriba y se tiene la mano grande como es mi caso.

Los módulos que tengo instalados de Kingston mide sobre los 45 mm, por lo que no da para que el ventilador frontal esté a la mínima altura. Eso hace que haya tenido que dejarla un poco más alzada, por lo que ya no mide el conjunto los 165 mm de la posición más baja de los ventiladores. Es en lo que insisto en lo que hay que tener cuidado a la hora de comprar esta refrigeración: que la caja tenga más bien para un disipador de 180 mm de altura.

Pruebas

El equipo de pruebas incluye una placa base Prime Z690-P de ASUS, 32 GB (dos de 16 GB) de DDR5-6400 de Kingston, un Core i7-12700K, una fuente RM1000x Shift de Corsair, tres unidades M.2 2280 PCIe 3.0 y 4.0, y una SATA. He hecho las pruebas con la tapa lateral puesta de una caja H7 Flow para que sea una prueba más realista, la cual tiene cuatro ventiladores AF120 Slim de Corsair puestos y funcionando a 800-900 r. p. m. por lo que no se les oye y por tanto no introducen ruido adicional. El ruido lo he medido a un metro de distancia del lateral de la caja. Para las pruebas en juegos he recurrido a las RTX 4070 y RTX 4090 de PNY.

CPU

En Cinebench R24 haciendo pasar la prueba de treinta minutos el procesador suele andar entre los 71-74 ºC con algún pico esporádico hasta los 76 ºC, con una temperatura ambiente de 26 ºC (∆46 ºC). El consumo de la CPU se sitúa en torno a los 158 W, y el equipo se sitúa en torno a los 260 W. En esta situación los ventiladores están a unas 1150 r. p. m. con un bajo ruido de 30-31 dBA. De noche con la casa en silencio, se nota que están puestos, pero de fondo y realmente no molestan. No tienen ningún ruido extraño.

En reposo el procesador está a 30-32 ºC (∆4-6 ºC), mientras que en tareas ofimáticas, navegación y cosas similares de poca envergadura cambia mucho entre los 31-42 ºC (∆13 ºC), por lo que el funcionamiento es silencioso, sin ningún tipo de ruido de fondo.

Si se retira la tapa de la caja la temperatura cae a los 67-71 ºC, con algún pico esporádico hasta los 74 ºC, por lo que tendría margen para aumentar la velocidad de los ventiladores de la caja. De hecho, si se pone su velocidad variable para acompañar a la CPU en lugar de fija, los tres frontales se quedan en unas 1200 r. p. m. y el trasero a unas 1450 r. p. m., el ruido sube ligeramente a 32-33 dB, y la temperatura se sitúa sobre los 67-72 ºC, con algún pico instantáneo esporádico hasta los 74 ºC, que es más o menos las temperaturas sin la tapa lateral.

GPU

Si se pasa a jugar, la situación es incluso mejor, y para ello he escogido Cyberpunk 2077 para dar algunos datos de interés. Empezando por la RTX 4070, a una resolución QHD y calidad 'ultra', la temperatura de CPU llega a un máximo de 54 ºC (∆28 ºC), con los ventiladores funcionando a unas 850 r. p. m., y con un ruido de 36 dB del conjunto del equipo debido mayormente a que los ventiladores de la tarjeta gráfica sí hacen ruido, aunque bajo. La GPU en esta prueba está a 70 ºC, y el equipo está consumiendo sobre los 360 W.

Pasando ahora a la RTX 4090, en el mismo juego pero a UHD y con DLSS, interpolación de fotogramas y calidad gráfica 'ultra', la temperatura de CPU se sitúa sobre los 58 ºC (∆31 ºC), con los ventiladores funcionando a unas 1000 r. p. m., y con un ruido de 33 dB del conjunto del equipo. La GPU en esta prueba está a 69 ºC (∆43 ºC), con un funcionamiento casi silencioso, y el equipo está consumiendo sobre los 520 W. Nuevamente, si se abre la tapa lateral del equipo se podría conseguir bajar tres o cuatro grados la temperatura, por lo que hay margen para subir la velocidad de los ventiladores de la caja.

Prueba con sobrefrecuencia

Nunca he conseguido subir mucho las frecuencias del Core i7-12700K que tengo en modo manual, por lo que de manera fácil, sencilla y cortesía del BIOS de ASUS en automático, se ponen a 4.8 GHz los núcleos P, a 3.8 GHz los núcleos E, y el consumo pasa de unos 155 W a unos 185 W en Cinebench R24, por lo que la diferencia puede ser de unos 30 W, aunque eso significa desplazar al procesador de su curva de voltaje y por tanto terminará calentándose mucho más que el aumento de consumo.

En este escenario el ventilador funciona a unas 1400 r. p. m., con la temperatura del procesador oscilando entre los 76-81 ºC (∆53 ºC), y el ruido se va a los 33 dB. Incluso en algún pico que se pueden poner a 1550 r. p. m. el ruido no sube mucho más, por lo que los ventiladores son bastante buenos.

En este caso vendría bien aumentar la velocidad de los ventiladores de la caja, pero por temas de normalizar las pruebas entre distintas refrigeraciones siempre los dejo a la misma velocidad. Si se aumenta la velocidad de esos cuatro ventiladores AF120 Slim a las 1200 r. p. m., que sigue siendo un ruido bajo, se puede conseguir en torno a 2-4 ºC de reducción de temperatura de CPU, lo cual también hace que baje ligeramente su velocidad de funcionamiento y el ruido que emiten, aunque el conjunto se sitúa en torno a los mismos 33 dB.

Cambio de pasta térmica

Por último, he hecho un cambio de pasta térmica por la MX-6 de ARCTIC para comprobar la calidad de la XTM70 de Corsair. Puede ocurrir que toquéis la pasta térmica preaplicada por distracción o que pongáis la refrigeración en una posición equivocada. Es por lo que habrá que tener un tubo de pasta térmica de por si acaso.

Con la pasta térmica de ARCTIC funcionará dos o tres grados más caliente, por lo que recomendaría que tuvierais cuidado con la XTM70 preaplicada. No es que sea una gran diferencia, pero la de Corsair es mejor. Tampoco es muy cara, porque está sobre los diez euros los cinco gramos, lo cual la sitúa entre las caras, pero realmente no lo es.

Gran refrigeración, en todos los sentidos

Personalmente prefiero la refrigeración por aire porque solo necesita un mínimo de mantenimiento y un buen bloque de disipación puedes usarlo durante muchos años sin tener que rellenar el agua o que se bloquee por cualquier motivo, siempre que la compañía cree el adaptador para los nuevos zócalos que siempre van apareciendo. La A115 de Corsair me parece una de las mejores del mercado, o al menos para cómo uso los equipos, porque no será apta para cualquier PC que se esté montando ni para cualquier jugón.

La altura puede ser un inconveniente para aquellos que buscan una refrigeración por aire para sustituir una antigua en su equipo. La mayoría de las cajas por debajo de los cien euros no permitirán instalar este bloque que se alza 165 mm, aunque como he comentado antes más bien su altura será sobre los 180 mm, principalmente porque si se monta el segundo ventilador en el frontal entonces habrá que alzarlo algo para que no choque con los módulos de RAM. La opción de montarlo inicialmente detrás no es la óptima, aunque es viable.

A la hora de la verdad, esta refrigeración puede mantener a bajas temperaturas el Core i7-12700K con que la he probado, tanto a su consumo normal a carga completa que son unos 160 W, como con una ligera sobrefrecuencia para que ande sobre los 190 W. Se queda claramente por debajo de los 250 W de potencia de diseño térmico para el cual está ideado, pero a cambio el funcionamiento es casi silencioso incluso a carga completa. No creo que se le pueda pedir mucho más a una refrigeración por aire de este tipo.

El tema está en que para que consuma tanto el procesador se le tiene que dar un uso profesional al equipo, porque en juegos el consumo de la CPU suele situarse sobre los 60-100 W. Para mantenerlo a buenas temperaturas no se necesita tanta refrigeración como esta A115, aunque otras puede que funcionen de manera audible. Así que la ventaja de decantarse por la A115 para un equipo para jugar sería obtener buenas temperaturas a un ruido casi inaudible, que no es poco.

Por lo demás, la refrigeración es muy fácil de instalar. El sistema de posicionamiento de los ventiladores y el ajuste de su altura me ha gustado especialmente. En los últimos años se ha simplificado mucho la instalación de las refrigeraciones, porque he sufrido algunas que eran más bien complicadas. Pero en este caso no he tenido ningún problema. Más allá de esto, el precio podría ser un inconveniente, pero ninguna refrigeración líquida de su precio va a ser mejor en el terreno de las temperaturas y el ruido.

Puntuación