NVIDIA lleva unos cuantos años haciendo caja con sus GPU para centros de datos, que básicamente se usan en aceleradoras como la H100. Es la única compañía que se ha tomado en serio el cómputo desde 2007, pero eso le ha hecho que esté en una posición dominante en el mercado de las aceleradoras. Y son habituales las voces que hablan mal de la compañía, sobre todo a raíz de unas declaraciones al Wall Street Journal del director ejecutivo de Groq, una empresa de inteligencia artificial, y que ha acusado a NVIDIA de abuso de posición dominante.
Los monopolios no están prohibidos, pero tienen prohibido usar su posición para evitar que entren competidores en el sector. Según Jonathan Ross, NVIDIA habría estado presionando a las compañías para no hacer negocios con otros fabricantes de chips para inteligencia artificial. O sea, estaría ejerciendo como trust, que es lo que está realmente prohibido en las legislaciones de (casi) todos los países. Entre otras acciones estaría amenazando a sus clientes con no aceptar pedidos o retrasar su entrega en caso de que compren a AMD u otras compañías.
Scott Herkelman, exdirectivo de AMD, ha respondido a la información que efectivamente es bien sabido que NVIDIA actúa de esta forma con sus clientes, ya sean OEM, ensambladores de tarjetas gráficas o distribuidoras. «Aprendieron gracias al GPP a no ponerlo por escrito».
El Programa de Asociados GeForce (GPP) es una polémica de 2018 en la que NVIDIA supuestamente usó ese programa de asociados para evitar críticas negativas hacia la compañía. Realmente no fue a más, ni siquiera judicialmente, porque todo el documento se sacó de contexto, y además la propia AMD tenía algo similar, por lo que la crítica de Herkelman no se fundamenta en nada que no se haga en el sector. Puede ser moralmente reprobable para los que firmen ese tipo de acuerdos, y poco más.
Pero eso no evita que NVIDIA pueda estar actuando como trust, y en el caso de que el director de Groq o Herkelman tengan pruebas de algo, pues deberían poner la correspondiente denuncia, aunque no se tengan realmente pruebas —no hacen falta para pedir a la fiscalía que investigue, solo tener dudas razonables—. Estoy seguro de que en la UE y EUA estarían encantados de meterle una buena sanción a NVIDIA para tener un pico extra de ingresos. Pero lo de «ha aprendido a no poner nada por escrito» no me vale, o se podría acusar de cualquier cosa a cualquiera «porque ha borrado las pruebas, pero el hermano de Ayuso es culpable. Creedme, por favor, ¿vale?, ¿porfiplís? Me da igual lo que digan los tribunales, ¡es culpable!». Pues eso.