Las prácticas empresariales de Apple empiezan a ser bochornosas. Multada en la Unión Europea recientemente por prácticas anticompetitivas con 1800 millones de euros, ahora ha tenido que introducir cambios debido a la Ley de Mercados Digitales que entra en efecto. Entre otras cosas, la App Store ya no será la única tienda de aplicaciones en iOS, además que tiene que permitir que se instalen aplicaciones fuera de la App Store. Apple ha retorcido el espíritu de la ley para imponer una cuota y un proceso de aprobación de esas tiendas, negándosela a Epic Games.
La compañía se estaba preparando para lanzar una tienda de aplicaciones este mismo año con la que Fortnite regresaría a iOS tras la confrontación legal de hace unos años que se saldó a favor de Apple. Es una confrontación bastante estúpida y una lucha de ego de Tim Sweeney que terminó como se esperaba: mal para Epic Games. No le salió bien en los tribunales ir de víctima.
Para pasarse la Ley de Mercados Digitales por el forro de sus cojones y escupirnos a los eurounionistas a la cara, Tim Cook ha establecido una serie de requisitos que claramente van en contra del espíritu de la ley, aunque probablemente sus abogados lo hayan estudiado como para que caiga en una zona gris y simplemente retrase la introducción de otras tiendas de aplicaciones en iOS. Todo el mundo se ha quejado sobre los términos para ello, que incluyen además cuantiosas provisiones económicas a Apple
Epic Games solicitó una cuenta de desarrollador a través de Epic Games Suecia, que fue aprobada por un proceso automatizado. Pero en una revisión manual, Apple ha cancelado la cuenta de desarrollador porque «Epic Games no es de fiar» debido a la ruptura de sus obligaciones contractuales en el pasado. Esa es la subida de ego que tuvo Sweeney y que fue estúpida por su parte. Entre idiotas anda el juego, aunque Epic Games tiene mucha más razón que Apple en este caso.
Sweeney alega que con este movimiento Apple se carga a uno de sus mayores competidores potenciales, porque además Epic Games iba a ir con todas con su tienda de aplicaciones de iOS. «Está minando nuestra capacidad de ser un competidor viable y está mostrando a otros desarrolladores lo que ocurre si intentas competir con Apple o se critican sus prácticas injustas», lo cual es totalmente cierto, aunque esto no es único de Apple, sino de casi cualquier gran empresa estadounidense que se piensa que el mundo es suyo para hacer y deshacer a su antojo, como han demostrado las últimas sanciones a Google, Facebook, Amazon, Microsoft o Qualcomm. Entre solo estas suman más de 15 000 millones de euros en sanciones por prácticas anticompetitivas.
Obviamente Apple se ha convertido en una unidad de precrimen sacando su bola de cristal y ha dicho, en boca de Phil Schiller, que es que Epic Games no es fiable y si ha roto su acuerdo contractual una vez lo va a hacer más veces, lo cual lo convierte en una entidad en la que no se puede fiar. Pero la cuestión es que, si la Ley de Mercados Digitales permite que cualquiera cree una tienda de aplicaciones en iOS, por qué narices necesita Epic Games, o cualquier otra empresa, una cuenta de desarrollador de Apple y provisiones económicas superiores al millón de euros para crearla. La situación de Apple, que ve peligrar miles de millones de euros de ingresos anuales en la Unión Europea, precisa de una investigación ya mismo y una sanción de miles de millones por trust. Es inaceptable lo que intenta hacer Apple.
Vía: Ars Technica.