Análisis: Razer Blackshark v2 Hyperspeed review en español

La serie Blackshark de Razer no es la que más me gusta de la compañía, pero con los últimos modelos he empezado a cogerle el gusto. El modelo más reciente que analicé fue el Blackshark v2 Pro 2023, que son excelentes por las mejoras en varios aspectos, pero continuistas. Los Blackshark v2 Hyperspeed de este análisis no son distintos, pero tienen algunos cambios que han hecho que me gusten aún más que el modelo anterior mencionado, y sobre todo un precio mejor.

Videoanálisis

Desembalado

Los Blackshark v2 Hyperspeed de Razer llegan en la habitual caja negra y verde de la compañía. Al abrirla se ven los auriculares en una bandeja de espuma junto al receptor Hyperspeed. Debajo está el cable de conexión USB tipo C a USB tipo A de 1.8 m, una guía de uso, y las habituales pegatinas del logo de la compañía.

El modelo prestado para analizar tiene un aspecto bastante bueno al combinar blanco y negro. Me gusta más que el modelo en color negro. Como el resto de los Blackshark, es de tipo circumaural cerrado de diadema y copas extensibles, aunque se hacen mediante un par de varillas que no dan la mejor sensción de construcción pero son bastante sólidas para el día a día.

Estos microauriculares se sujetan haciendo pinza ligeramente ya que las copas no pueden girar ni un poco, pero no molestan nada. De hecho, la combinación del buen acolchado de la diadema y de las almohadillas de cada auricular le dan una buena comodidad. Las almohadillas son fácilmente retirables simplemente tirando de ellas, y por tanto sustituibles por otras cuando se desgasten, que eso suele ser tras dos o tres años de buen uso diario.

La diadema está forrada de cuero sintético, mientras que las almohadillas tienen viscoelástica y usan cuero sintético para los laterales y tela transpirable para la superficie que queda pegada a la cabeza. Me da la sensación de que en mitad del verano podrían dar un poquito de calor, pero dentro de lo razonable para cualquier auricular.

Son unos auriculares más ligeros que otros de la serie, con un recorte hasta los 280 g. Eso lo pone más en línea de modelos para escuchar música y abunda en su comodidad a la hora de llevarlos durante horas. Igual es por el menor peso, pero he notado que aíslan pasivamente menos que el modelo Blackshark v2 Pro 2023 que probé hace unos meses. Si se tienen a un nivel de sonido normal a bajo no filtrarán el sonido que estén reproduciendo al exterior.

En la copa izquierda se encuentra el micrófono, que no es retirable, lo cual es una pena. Se incluye en ella el conector USB tipo C que permite cargarlos pero también usarlos por cable. A ese cable se le puede poner el receptor Hyperspeed para funcionar inalámbricamente en la banda de los 2.4 GHz con las mismas características de uso que si fueran usados por cable. Se pueden conectar también por Bluetooth.

En esta copa también hay un botón para silenciar el micrófono, una rueda de volumen y el botón de encendido. En la copa derecha solo hay un botón llamado SmartSwitch que sirve para cambiar entre varias ecualizaciones de sonido, pero si se pulsa dos veces se cambiará entre la conexión Bluetooth y la Hyperspeed. Ambas pueden estar conectadas a la vez, por ejemplo para estar jugando en PC y si en el móvil entra una llamada se podría responder.

Características

Los BlackShark v2 Hyperspeed incluyen unos transductores de 50 mm denominados TriForce, los cuales la compañía puede afinar en tres partes para mejorar por separado el sonido de los graves, agudos y frecuencias medias. Eso les da un sonido bueno… si se configuran adecuadamente. Prefiero los auriculares que salen de fábrica con un perfil de sonido afinado según estime la compañía para los transductores, pero esos suelen darlo los de música. Como estos son para jugar, y vienen normalmente con los subgraves reforzados, no me importa tener que hacer ese ajuste adicional.

Los transductores tienen una respuesta en frecuencia entre los 12 y 28 000 Hz, una impedancia de 32 Ω y una sensibilidad de 100 dB. Usan una conexión con receptor Hyperspeed, la conexión Bluetooth 5.2 y, a diferencia de los Blackshark v2 Pro 2023, tienen sonido por el cable USB incluido. Solo a través del receptor Hyperspeed o el cable se puede usar el sonido espacial THX, y por las conexiones incluidas se pueden usar con una variedad de dispositivos, salvo las consolas Xbox o los que necesiten una toma de audio de 3.5 mm.

En cuanto a la calidad del sonido, siempre que pruebo unos auriculares tengo a mano los Bluetooth que uso de referencia, unos Quietcomfort 35 II de Bose. No tienen una respuesta en frecuencia totalmente neutra, pero está muy cerca de ello. La primera vez que conecté los Blackshark v2 Hyperspeed el sonido me pareció decente para luego pasar a malo. Se notaba una escena amplia, pero a medida que pasaban un par de canciones de baile de Tiesto y Guetta todas las frecuencias se notaban apagadas.

Ninguno de los perfiles incluidos me parece bueno para música, ni siquiera el de 'música', por irónico que parezca. He tenido que ir a Synapse 3.0 para mirar el perfil 'personalizado' para comprobar que su respuesta en frecuencia tampoco viene por defecto con ganancia cero en todas las bandas. Una vez que he puesto todo a cero, la calidad de reproducción de la música ha mejorado muchísimo.

Las canciones de rock se notan con buenos agudos y graves, las de baile cantaditas se escuchaban nítidas, con escena amplia y un sonido bastante más neutro. Se distancia de lo que ofrecen los de Bose que uso, pero son de una categoría bastante superior a estos Blackshark v2 Hyperspeed, por lo que me parece bastante bueno para el precio.

He intentado hacer funcionar el sonido envolvente, y el resultado ha sido deslucido. El sonido espacial es un todo o nada, o funciona o no funciona. En estos auriculares se queda a medias y por tanto no me ha dado la sensación de que realmente aporten algo útil, porque además depende mucho de cómo implemente cada juego el sonido envolvente. En los Blackshark v2 Pro se notaba algo mejor, pero tampoco mucho. Son compatibles con Windows Sonic, así que hay que seleccionar ese tipo de salida de sonido en los ajustes de sonido de Windows.

El micrófono es unidireccional, y a la tecnología del diseño del micro la llaman HyperClear. Este micrófono tiene una respuesta en frecuencia entre los 100 y 10 000 Hz con una sensibilidad de –42 dB, que es mucho más de la necesaria para los rangos en los que se mueve la voz humana.

Se consigue una nitidez de voz muy alta, aunque no llegue a la de un micrófono profesional, pero para las partidas no habrá problema en que los compañeros escuchen la voz perfectamente. Graba algo mejor por cable o el receptor Hyperspeed que por Bluetooth, como suele ser normal, pero la diferencia no es mucha; para comprobarlo habrá que escuchar ambos con la conexión por cable. El añadido de la espuma para el micrófono es bastante efectivo.

En cuanto a la autonomía de los auriculares, Razer habla de hasta 70 horas de uso, lo cual es excelente porque modelos similares de otras compañías tienen en torno a veinte o treinta horas de uso. La autonomía por Bluetooth sí alcanza la indicada por Razer, y tras una semana de usarlos en torno a unas cinco horas al día le quedaba algo menos de la mitad de batería.

Programa de configuración

La configuración recae como es habitual en Synapse 3.0, la cual siempre me ha parecido una gran aplicación. No hay excesivos parámetros que ajustar, pero entre ellos están el mezclador de volumen, el ecualizador que sirve en esta ocasión para el sonido normal y el envolvente, perfiles de audio para distintos juegos, opciones de autonomía, o refuerzo de graves o claridad de voz. El micrófono tiene opciones similares, con un ecualizador que es también de diez bandas.

Gran sonido de auriculares y micrófono

El refinamiento de la serie Blackshark se va cocinando a fuego lento, y en el caso de los Blackshark v2 Hyperspeed me han gustado especialmente algunas cosas como su diseño. Es similar, pero con mejor sensación al tacto, y su peso de 280 g en lugar de 320 g de los Blackshark v2 Pro me parece un acierto para llevarlos sin ninguna molestia durante más tiempo. La calidad de fabricación está mejorada, o al menos me gusta más el acolchado y cuero sintético.

El sonido es un apartado que está muy bien cubierto con los transductores Triforce. Viene con cuatro ecualizaciones distintas entre las que cambiar desde un botón de los auriculares, lo cual me parece muy positivo, aunque al final lo he dejado continuamente en el personalizado puestas todas las bandas a ganancia cero. De otra forma, la respuesta en frecuencia se aleja bastante de la que me gusta, como la de los QuietComfort 35 II que uso habitualmente.

No veo ventajas en usar el perfil de ecualización de 'juego' o el de 'música' porque desplazan la respuesta en frecuencia bastante. Con el perfil de 'música' irónicamente la música se escucha rara. Sí, la escena es amplia, pero todas las frecuencias carecen de fuerza, incluso los graves. Eso no ocurre con el ajuste 'personalizado' que he creado con ganancia ceero a todas las bandas. Y en ese caso, la música sí suena muy bien.

En juegos, el modo 'juego' refuerza los graves y por tanto habrá gente que lo prefiera. Eso ya es cuestión de gustos, y siempre se pueden modificar más en Synapse 3.0. Si se cambia entre Bluetooth y el receptor Hyperspeed o por cable se puede notar claramente que la música mejora algo, aunque suenen bien se usen como se usen. El audio espacial THX siempre puede ayudar en ciertos juegos, pero realmente no se nota mucha diferencia en este modelo entre tenerlo o no tenerlo activado.

Sobre el micrófono, me parece uno de los mejores que he probado, como suele ocurrir con los incluidos en los microauriculares de esta serie Blackshark. Puede haber una ligera diferencia entre grabar el audio por Bluetooth y por el receptor USB —o por cable—, pero no es excesiva por lo que se puede jugar bien por Bluetooth. Además la latencia es normal, ni buena ni mala, pero a la hora de jugar no he notado el retardo, o al menos no lo he notado sin ponerme a buscarlo conscientemente. En caso de que moleste, que no debería, la latencia por el cable USB o el receptor Hyperspeed es mínima.

Por lo demás, me parecen unos auriculares muy buenos, siempre que se compren al precio adecuado. En el momento de escribir esto su PVP es de 135 euros, en lugar del PVPR de 150 euros, pero creo que aportan mucho valor por ese coste. Tienen un diseño que me gusta, son ligeros, cómodos, y los propios altavoces que incluyen tienen un buen sonido además de que el micrófono graba con muy buena calidad. Si se une a una alta autonomía, la conectividad Bluetooth, receptor Hyperspeed, que pueden estar ambas conexiones establecidas, y que también se pueden usar por cable USB, creo que es un precio muy bueno para todo lo que aportan. Es uno de esos pocos productos del catálogo de Razer que hasta me parecen baratos.

Puntuación