Análisis: MSI MAG 274QRFW review en español

El sector de los monitores está girando ahora mismo en torno a los QHD de 27 pulgadas y al menos 144 Hz por ser los que mejor relación precio-prestaciones ofrecen. Entre ellos está el MAG 274QRFW de MSI, el cual añade a la ecuación un refresco de 180 Hz para un extra de fluidez en caso de tener una tarjeta gráfica buena que aproveche su resolución y refresco. Es un modelo de precio contenido, sin alardes en cuanto a los extras, pero ciertamente resulta llamativo por el precio.

Desembalado y montaje

El MAG 274QRFW de MSI llega en la habitual caja de cartón con asa y embutido, desmontado, entre dos piezas de poliuretano. Al sacarlas se verá en una de estas piezas los extras: un cable de corriente, un cargador, un cable DisplayPort, y los tornillos para el montaje VESA de 75 mm × 75 mm. En la otra está el pie separado del mástil, pero se monta simplemente poniéndolo encima y con un tornillo moleteado que evitar tener que usar un destornillador.

El panel llega protegido por una bolsa y es conveniente usar la pieza de poliuretano para su montaje para evitar que se dañe el panel sobre una superficie. Solo hay quitar los dos tornillos de sujeción puestos en la parte trasera del monitor, poner el pie y, esta vez sí, fijarlo con un destornillador. Alternativamente se puede montar un soporte VESA de 75 mm × 75 mm.

El aspecto del monitor es muy bueno, en color blanco, con el logo de la compañía en la parte trasera y una franja de ilumación ARGB que se puede modificar desde el menú del monitor. También está la palanca para encenderlo pulsándola y para controlar el menú; va suficientemente bien para ello. El panel tiene pocos marcos, pero no son mínimos, aunque no molestan. En la parte inferior hay una franja blanca con el logo de la compañía.

En la zona de conectores se puede ver una toma tubular para el cargador externo, que es de pequeño tamaño y unos 25 W, dos HDMI 2.0b, un DisplayPort 1.4a y una toma de audio de 3.5 mm. Es un modelo básico, sin concentrador USB, altavoces y sin puerto USB tipo C, que es por lo que cuesta menos que otras alternativas con estas características.

Características

El panel IPS del MAG 274QRFW está fabricado por LG. Tiene una diagonal de 68.6 cm (27 in) con una resolución de 2560 × 1440 píxeles, con un refresco de 180 Hz y un tiempo de respuesta de solo 1 ms de gris a gris. Tiene un acabado antirreflejos. Lo he probado principalmente en perpendicular a una ventana por la que entra mucha luz al estar orientada al sur, y no se ve ningún reflejo.

Alcanza los 400 nits de brillo de pico al reproducir en HDR, con un contraste estático de 1000:1, aunque en la práctica puede llegar a 1400:1 en las pruebas que he realizado. Incluye refresco adaptable compatible FreeSync entre los 48 Hz y 180 Hz, y es compatible con G-SYNC por lo que se activa por defecto en el Panel de control de NVIDIA. La calidad de color potencial es buena, siendo un panel de 10 bits (8+FRC) y cubriendo el 93 % de la escala de color Adobe RGB y el 95 % de la DCI-P3.

Uso

No he entrado a valorar en profundidad la calidad del panel porque carezco de las herramientas para ello. Para probarlos decentemente se necesitaría una inversión de en torno a diez mil euros, y aunque me gustaría, me resulta inviable. A cambio, he usado una herramienta buena pero que solo prueba una parte de la calidad como es el Colorchecker Display Plus de Calibrite, junto a su programa de calibrado que sirve para hacer algunas comprobaciones de color y uniformidad.

No me gusta entrar a análisis muy técnicos de cosas como los monitores porque eso es solo para los más sibaritas. Lo que hay que determinar es si sirven para un usuario normal o no, lo cual cae en la parte de percepción humana y no en la de poner números objetivos que realmente no dicen al final si un monitor es apto o no para uso humano. Para determinarlo uso mi criterio profesional de diseñador gráfico, que me precio de tener muy buen ojo para temas de color, y el sentido común.

Uniformidad

En los monitores para jugar, sobre todo si tienen HDR, lo idóneo es que estén ajustados a la escala de color DCI-P3, de la que MSI dice que este panel cubre el 95 %. Es una cantidad suficiente, porque además en general el color del monitor es bueno, aunque no es perfecto. Vaya por delante que la unidad para analizar recibida es de préstamo, por lo que ha pasado por bastantes manos antes de recibirlo. El trasporte y almacenamiento suele afectar a su uniformidad, y es de lo primero de lo que voy a hablar.

Usando el Colorchecker Display Plus he comprobado que la uniformidad del panel está en la media. El lateral izquierdo se distancia un poco más de lo normal en la reproducción de blancos puros mientras que el derecho se distancia poco respecto al centro de la pantalla. Se nota claramente, al tener documentos abiertos, que hacia los laterales se oscurece la pantalla bastante más de lo habitual en otros monitores, como el del MacBook Pro que uso o el monitor 27GP950 de LG que uso habitualmente. No molesta, pero la peor uniformidad en blanco del lateral izquierdo está ahí. En lo que respecta a grises y grises oscuros, la uniformidad está bien.

La uniformidad de los negros está igualmente bien, y con la habitación a oscuras hay poco brillo IPS, aunque eso es imposible de eliminar por la tecnología.

En cuanto a la reproducción de color, según como viene de fábrica los colores se notan bastante saturados, lo cual beneficia los juegos o la reproducción de vídeo pero sirve de poco para un uso más profesional. Tras un proceso de calibrado en sRGB, la precisón del color mejora hasta niveles en los que se puede usar en entornos profesionales. En la reproducción de degradados no se nota una gran suavidad entre franjas de color, pero tampoco se hacen totalmente obvios, por lo que el panel cubre decentemente ese apartado.

Hay que tener en cuenta que lo calibro a 180 nits en lugar de 120 nits, por lo que pone de manifiesto más fácilmente las diferencias de uniformidad del panel, pero como no solo uso el monitor para trabajar, sino también para jugar, es un brillo equilibrado.

HDR y refresco

Al activar en los ajustes de pantalla de Windows el HDR, se hace muy necesario calibrar la pantalla de una forma u otra, o la calidad del color al usar el escritorio será muy pobre. Si ya está el monitor calibrado, al activarlo es usable, con colores decentes, pero aun así sería recomendable calibrarlo.

Con un certificado DisplayHDR 400 lo mejor que se puede conseguir es un falso HDR resultón. El falso HDR de Dell lo suelo encontrar malo, el de LG bastante resultón, y este de MSI está en la misma línea que el de LG. Al activarlo para jugar, se nota una mejoría en la saturación y se nota claramente que hay más rango dinámico, pero ante la falta de zonas de atenuación local el HDR da para lo que da. Lo he probado en varios juegos, como Cyberpunk 2077 o The Division 2, y personalmente dejaría puesto el HDR para jugar.

Por lo demás, el uso en juegos de este panel es perfecto. Con un refresco adaptable de 180 Hz la sensación de fluidez es máxima. No suelo ser capaz de distinguir el cambio de refresco cuando un juego funciona a 80-100 Hz y cuando pasa a 144 Hz o los 180 Hz de este modelo, pero se supone que habrá jugadores profesionales que sí, sobre todo los que se dan a los ciberdeportes. El alto refresco suele notarse más en el terreno de que los ojos descansan más frente a bajas tasas de refresco. No se notan problemas de estela u otros defectos de imagen.

Nitidez de texto

En esta ocasión Windows 11 ha mejorado bastante en la forma en que gestiona el texto y por ese lado ha cambiado mucho mi opinión en los últimos meses sobre los monitores QHD. Con un reescalado al 125 % del escritorio la visualización del texto es bastante nítida. En este caso no se aprecian otros efectos indeseables al reproducir color gris muy oscuro. Ciertamente se nota que la imagen no es totalmente nítida, pero para conseguirlo habría que pasar a un monitor UHD con escalado a 200 %. En macOS se ve bastante más nítido el texto que en Windows 11, por lo que por ese lado Microsoft todavía tiene margen de mejora.

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Conclusión

El MAG 274QRFW de MSI es un monitor muy generalista pero que demuestra que realmente no hace falta gastarse 500 o 1000 euros en un monitor salvo que se sea muy sibarita. Este monitor tiene un panel IPS más que decente, con un color que llega saturado de fábrica pero que lo convierte por tanto en más vistoso para el día a día, pero que tras un calibrado puede tener un color decente para trabajo profesional, aunque diste de ser el mejor para ello.

En lo que respecta a los juegos, que es su uso principal, la cobertura de la escala DCI-P3 es suficiente para que sean vistosos. La inclusión de un falso HDR decente hace que personalmente lo activara para jugar, como lo he activado muchas veces en otros monitores de LG que he usado en el pasado. Mejora el rango dinámico lo suficiente para mejorar el brillo y mostrar colores un poco más vistosos, por lo que cubre su propósito. Pero el HDR de este monitor da para lo que dan todos los falsos HDR, aunque de manera algo más destacable.

Por lo demás, como modelo que ronda actualmente los 230-240 euros, y siendo QHD de 180 Hz sin problemas evidentes de imagen, es un modelo más que bueno. Podría tener un concentrador de USB, altavoces o un USB tipo C con carga, pero eso sería otro producto más caro, y la propia MSI tiene en su catálogo monitores así. Pero si se quiere un monitor de precio contenido para jugar, es una buena alternativa.

Puntuación