El sector de los paneles para televisores y monitores está migrando cada vez más rápido a los paneles OLED. Aunque no es una tecnología perfecta, y dependiendo del caso de uso, aportan una calidad de imagen especialmente buena, sobre todo para mostrar imágenes en alto rango dinámico por su capacidad de activar el brillo de cada píxel de manera individual. Eso es ideal para juegos y vídeos, que es básicamente la mayor parte del consumo que se hace. Así que LG tiene claro que tiene que terminar la migración cuanto antes con la venta de su fábrica de paneles LCD en China.
El montante de la operación es de 1500 millones de dólares, y el comprador es TCL, uno de los gigantes chinos de la electrónica, que no son pocos hoy en día. Se espera que la operación se cierre en marzo de 2025. LG seguirá con el resto de sus operaciones en China, centrándose por tanto a partir de ahora en los paneles OLED. La venta de esta fábrica también se debe a que la compañía quiere centrarse en las partes de su negocio que son más rentables debido a la problemática situación económica ligada con la alta inflación de los últimos años y a los factores geoestratéticos. Los paneles IPS están experimentando un hundimiento de demanda en Japón para el sector consumo.
Vía: Tom's Hardware.
