La industria de la DRAM ha experimentado cambios significativos debido a la guerra de los chips que se está librando entre China y EUA. Eso a llevado al país asiático a aumentar su producción para forzar el hundimiento de precios, lo cual podría llevar fuera del negocio a muchos fabricantes menores estadounidenses y de otros países. Así que no es de extrañar que empresas como Changxin Memory Technologies (CXMT) y Fujian Jinhua estén ofreciendo chips de DDR4 a precios hasta un 50 % más bajos que sus rivales surcoreanos, como Samsung y SK Hynix.

CXMT ha incrementado su capacidad de producción de 70 000 a 200 000 obleas mensuales entre 2022 y 2024, y planea alcanzar las 300 000 obleas en el futuro cercano, acaparando el 11 % del mercado global. Este aumento ha permitido a los fabricantes chinos seguir su estrategia de desplome de precios. Por su parte, los productores surcoreanos han comenzado a reducir su producción de DDR4, centrando su atención en tecnologías más avanzadas como DDR5 y HBM3, donde la competencia china aún no ha alcanzado la producción en masa.

El Gobierno chino respalda esta expansión con subsidios y políticas que fomentan la producción local como respuesta a la imposición artificial de sanciones a las compañías chinas para que adquieran maquinaria litográfica avanzada. Además, se están explorando estrategias para acceder a mercados internacionales, como el de la India, colaborando con marcas taiwanesas para sortear riesgos políticos y económicos relacionados con la cadena de suministro china.