Intel despidió a un ingeniero como su director ejecutivo a finales del año pasado, y desde entonces ha estado funcionando con dos codirectores interinos. La compañía al menos ha sido rápida a la hora de elegir un nuevo director ejecutivo, y no tengo claro que su perfil sea lo que necesita la compañía aunque es bastante mejor para una empresa de procesadores que el de Brian Krzanich y Bob Swan que hundieron la innovación en la compañía mirando más por los beneficios. El nuevo director ejecutivo es Lip-Bu Tan, exmiembro del consejo de administración de Intel, licenciado en físicas y administración de empresas.
Fue presidente del consejo de administración de Intel, y fue presidente de Cadence entre 2009 y 2021, una de las dos principales empresas de programas de diseño y testeo de chips con cierta capacidad de diseño de chips, o más bien partes de ellos, como las interfaces Ethernet o de memoria que luego licencia. Al menos Lip-Bu Tan, en su presentación como director ejecutivo, ha indicado la importancia de establecer un plan de litografías. Está por ver lo que piensa hacer con Intel Foundry, aunque sería estúpido deshacerse de esa parte de su negocio. También han hecho un hueco a Tan en el consejo de administración junto a su nuevo puesto en Intel.