Hoy ha sido un día movidito en el panorama prenavideño de lanzamientos de videojuegos puesto que ha aterrizado Fallout 4, pero los amantes de la estrategia en tiempo real habrán estado encantados con la llegada de Legacy of the Void, el cierre de la trilogía de StarCraft II.
Como ocurre con cada expansión de StarCraft, la intención de Blizzard es modificar las mecánicas de juego para que los jugadores tengan que adaptarse a la inclusión de nuevas unidades para cada una de las razas. Además del modo de campaña (imprescindible de jugar) que se centra en los protoss, hay nuevas misiones cooperativas, competiciones diarias y el modo Arconte en el que dos jugadores controlarán una base para luchar contra dos oponentes.
Está disponible por 40 euros en las tiendas para OS X y Windows, y con una edición digital de lujo de 60 euros, con algunos extras como una mascota para World of Warcraft, una montura para Heroes of the Storm, y más.
