El próximo 14 de agosto llega la próxima ampliación de World of Warcraft que lleva por nombre Battle for Azeroth y, como es costumbre con una antelación de un mes, Blizzard ha actualizado el cliente de juego. Pero en esta ocasión, y en un cambio que no está documentado, la compañía ha metido compatibilidad con la biblioteca gráfica DirectX 12.
La experiencia de Blizzard con las bibliotecas gráficas o API de bajo nivel viene de largo, ya que hace un par de años actualizó los clientes de juegos para macOS añadiendo Metal, la DirectX 12 de Apple. Puesto que esas API (interfaz de programación de aplicaciones) no cambian mucho en el fondo entre sistemas, una vez que lo tienes para una API es fácil —que no digo que no sea laborioso o no requiera su tiempo— llevarlo a otras.
En los equipos con una tarjeta gráfica de AMD llega con DirectX 12 preseleccionada —al menos en el NUC Hades Canyon que tenía a mano para comprobarlo—, ya que por lo general funciona mejor en las tarjetas gráficas Radeon [Edito: lo he probado y no parece haber mejora en cuanto a FPS máximos, pero sí podría haber una ligera mejora en cuanto a los mínimos]. Las GeForce serie 10 de Nvidia debería funcionar también mejor, aunque no sé en este momento si está preestablecido DX11 o DX12 o si realmente aporta una mejora de rendimiento —lo actualizaré cuando lo compruebe—. Blizzard también prescinde con este cambio gráfico del modo a pantalla completa exclusivo, y añade cinemáticas a 21:9.
DirectX 12 va a cobrar más fuerza en 2019, ya que, ahora sí, a diferencia de en 2015 cuando llegó Windows 10, hay multitud de juegos que están siendo desarrollados para esta API. Este año también llegarán algunos otros, como The Division 2, por lo que ya está recibiendo más atención de los estudios. Al menos, una vez que los motores gráficos han sido adaptados para ser compatibles y empieza a ser algo más fácil su implementación.
Vía: TechPowerUp.