El sector de los videojuegos se está reorganizando tras el bum que experimentó durante la pandemia de la covid-19. Entre el bajón posterior y la inflación, muchas editoras se han quedado tocadas, y están optando por vender ciertos estudios o recortar plantilla. Ahora Take-Two Interactive ha optado por lo segundo, aunque tras hacer compras como la de Gearbox por 480 M$. La compañía va a despedir a unos 600 empleados antes de final de año.
El coste de los despidos será de 35 M$ pero ahorrará a la compañía 165 M$ anuales. En parte serán puestos redundantes de Gearbox, pero también tocará otros estudios. También va a cancelar algunos títulos que estaban en desarrollo, sin dar nombres. Esto supondrá un coste de otros 140 M$. La compañía lo hace después de que su director ejecutivo dijera que no iba a haber despidos en la compañía.
Vía: EnGadget.