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Quizás Intel anuncie en breve los procesadores Rocket Lake S aunque no se pongan a la venta hasta marzo, y mientras tanto los fabricantes de placas base están confirmando los modelos que serán compatibles con ellos. Esos procesadores conformarán los Core de 11.ª generación con los que Intel tendrá que aguantar la embestida de AMD con los Ryzen 5000. Pero no tanto en el apartado del rendimiento, que los actuales Core de 10.ª gen. son competitivos en precio-rendimiento, sino en la plataforma en sí.

AMD anunció el mes pasado que iba a hacer cambios al BIOS para permitir una bajada adaptable de voltaje a los procesadores Ryzen 5000 de modo que se optimiza la curva de tensión-frecuencia. Un «optimizador de la curva». MSI ha mostrado esta característica en funcionamiento y lo ha hecho en una placa base B450 haciendo uso del nuevo AGESA 1.1.0.0 parche D como parte del Precision Boost Overdrive 2.0.

Intel está pendiente de renovar buena parte de sus procesadores durante el primer trimestre de 2021, sobre todo los de portátiles y de sobremesas. Aparentemente la compañía recurriría a su conferencia en el CES 2021 para introducir parte de los nuevos productos que está preparando, aunque se centraría en los chipsets para las placas base de los Rocket Lake S. Estos procesadores llegaría a finales de febrero o marzo, y supondrían los primeros procesadores con una nueva arquitectura de núcleo para el sector sobremesa en más de un lustro.

Poco a poco las actualizaciones para las placas base con chipset serie 400 de AMD están llegando para poder usar los Ryzen 5000 en ellas. Pero como era de esperar, y como ha ocurrido anteriormente, puede que también lleguen a algunas placas base X370. No de todas las compañías y probablemente no para todos los modelos, pero de momento se ha visto que ASRock trabaja en un BIOS para las X370 Taichi y X370 Fatal1ty Professional para compatibilizarlas con los Ryzen 5000.

BIOSTAR ha actualizado finalmente sus placas base implementando la característica estrella de los Ryzen 5000. Se trata del acceso inteligente a memoria (SAM) que es el nombre específico de AMD para el registro de direcciones base redimensionable (RBAR) de la especificación PCIe. El cambio de nombre es para hacerlo más rimbombante, pero es una tecnología que también está llegando a las placas base de la serie 400 de Intel para procesadores Core de 10.ª generación. Lo que sí es cierto es que las RX 6000 son las únicas que usan RBAR, o al menos hasta que NVIDIA termine de implementarlo en las Ampère.

AMD ha tardado un poco más en proporcionar a los fabricantes de placas base el microcódigo base para que el BIOS de la serie 400 sea compatible con los Ryzen 5000, pero más pronto que tarde las compañías están sacando las nuevas versiones. Tampoco es que importe en exceso porque los Ryzen 5000 siguen agotados y los que los consiguen optan generalmente por una B550 o X570, pero de cara a unas semanas cuando mejore la disponibilidad es probable que los propietarios de una B450 quieran mejorar un Ryzen 2000 a un Ryzen 5000, por ejemplo.

La siguiente compañía en implementar RBAR (registro de direcciones base redimensionable) en sus placas base con chipset serie 400 de Intel es ASRock, aunque se lo va a tomar con un poco más de calma que otras compañías. Esta característica permite una ganancia directa de rendimiento en las tarjetas gráficas eliminando ciertas restricciones de acceso a la VRAM desde el procesador y ya se encuentra en los controladores de las Radeon RX 6000.

BIOSTAR ha añadido una placa base más con chipset B550 a su catálogo, y es un modelo que tiene un formato micro-ATX de 24.4 cm × 24.4 cm. Su estética es en negro y gris con realces en blanco en torno al disipador del chipset, la cubierta de los conectores traseros y el disipador del sistema de alimentación. No cuenta con iluminación ni otras características raras por lo que no debería ser cara.

AMD dio la sensación durante la presentación de los Ryzen 5000 que el acceso inteligente a memoria (SAM) era algo revolucionario y único de los Ryzen 5000 y las RX 6000, aunque no lo dijo expresamente. Pero ha terminado resultando que los procesadores Intel son compatibles y por eso hay compañías que están ya implementando la tecnología en la que se basa de PCIe en las placas base serie 400 de Intel. Pero, si así lo quisieran, podrían introducirlo en las placas base tan antiguas como las de los Core de 4.ª generación, los Haswell.

Y finalmente las compañías de placas base han empezado a implementar una característica que lleva en el estándar PCIe desde hace un lustro y que permite una mejora del rendimiento en juegos en las tarjetas gráficas más potentes. Hablo nuevamente del registro base de direcciones redimensionable (RBAR) que ya está implementado en las placas base serie 500 de AMD con el nombre de acceso inteligente a memoria (SAM) para los Ryzen 5000 y que se puede aprovechar con las Radeon RX 6000.