Dentro de la oferta de chipsets que tiene actualmente Intel en el mercado, los C232 y C236 están orientados a equipos profesionales, estaciones de trabajo y servidores. También desde hace algún tiempo a los jugones, con algún modelo de placa base de ASRock y Gigabyte, aunque el objetivo de la X170 Extreme ECC es algo distinto.
Estas placas están pensadas para los procesadores Xeon E3-1200 v5 Skylake, pero también acepta procesadores Core i3, Pentium y Celeron de Skylake. Gigabyte remarca que es la primera placa base C236 con certificación para usar Thunderbolt 3, aunque se pueden contar con la mano las placas de este chipset.
La importancia de Thunderbolt 3 en equipos de sobremesa, más allá de que se puedan usar gráficas externas en equipos de pequeño tamaño pero que en placas base como esta no tenga tanta utilidad, es la posibilidad de conectar dispositivos Thunderbolt 3 tipo NAS y similares. Dispone de un ancho de banda de 40 Gbps, y con la continua bajada de los precios de los SSD, puede mejorar notablemente el mover archivos de gran tamaño en una red local. Pero eso ya sería una cuestión de analizar otros posibles casos de uso.
Por lo demás, la GA-X170-Extreme ECC incluye dos zócalos para tarjeta M.2 (SSD en formato 2280 o combos Wi-Fi+Bluetooth de tipo 2230 por ejemplo), tres conexiones SATA Express, además de que el Thunderbolt 3 trasero con conector USB Type-C también soporta el protocolo USB 3.1, por lo que dobla como USB-C. Este puerto es capaz de entregar hasta 36 W ya que implementa la especificación USB Power Delivery, el que permite utilizarlo como toma de alimentación en dispositivos como el MacBook o el Chromebook Pixel.
Vía: Nota de prensa.