Una de las ventajas de las aplicaciones universales de Windows 10 es que pueden estar también disponibles para Xbox One al compartir su núcleo OneCore. Pero hay un problema relacionado en forma de los emuladores de juegos de otras consolas que estaban intentando adentrarse en la Windows Store para llegar de esta forma a la Xbox One. Finalmente no será posible, ya que Microsoft los ha prohibido oficialmente de su tienda de aplicaciones y juegos.
La compañía ha introducido un cambio en sus normas para aplicaciones de la Windows Store, que ahora indica que las "aplicaciones que emulan un juego no están permitidas en ningún dispositivo". Por un lado, esto permitirá a los estudios seguir vendiendo ediciones remasterizadas y portados de juegos, que es algo que se está poniendo cada vez más de moda.
Por otro, evitará el juego interplataformas en los títulos indi, ya que la única forma de tener juego cruzado entre Windows 10 y Xbox One será el habitual de ponerse en contacto directamente con Microsoft, y deja fuera jugar con los usuarios de otras consolas. En la práctica, este cambio simplemente deja las cosas como estaban, ya que en realidad no hay ningún emulador de juegos de otras consolas en Xbox One —había llegado el año pasado uno de Nintendo 64, pero fue muy brevemente—.
Vía: VG 24/7.