Puede que a Intel se le hayan retrasado sus planes de lanzamiento de tarjetas gráficas la actual pandemia de covid-19, pero lo que no parece estar tan afectado es la llegada de los Tiger Lake U que usarán la nueva arquitectura gráfica Xe. Intel empezó a distribuir entre los desarrolladores a principios de año la DG1 de referencia, y desde entonces se ha visto (supuestamente) en varias ocasiones en pruebas de rendimiento.
Ahora vuelve a aparecer en 3DMark, específicamente en la prueba Fire Strike, y se queda con un rendimiento por debajo de la Radeon RX 560 o la GeForce GTX 1050 Ti. No es mal resultado, porque hay que tener en cuenta lo que no es la DG1: una tarjeta gráfica comercial. Y ahora lo que es: una tarjeta gráfica para probar la arquitectura.
La razón de ser de la DG1 es que imita al chip incluido en los Tiger Lake U con arquitectura Xe para que los desarrolladores optimicen sus juegos y aplicaciones para funcionar con esta nueva arquitectura gráfica. Por eso tiene la misma configuración de unidades de ejecución que la unidad gráfica gen. 12 que usarán los Tiger Lake U, y eso son 768 sombreadores en total, aunque le acompañan 3 GB de memoria (no se sabe a qué frecuencia). Los Tiger Lake U, al igual que los Ice Lake U, se tendrán que emparejar con memoria de al menos LPDDR4 a 3733 MHz para beneficiar a la unidad gráfica. Probablemente la DG1 use memoria DDR4-3733 o GDDR5 limitada a esa velocidad para imitar el rendimiento de los Tiger Lake U. Si esta unidad gráfica integrada de los Tiger Lake U va a tener un rendimiento cercano a una RX 560 o GTX 1050 Ti, me parecen buenas noticias.
Reitero que esto no es una tarjeta gráfica comercial, y no se sabe que Intel tenga planes para ponerla a la venta. En su presentación en el CES 2020, Intel dijo de la DG1 lo que ya he dicho antes, que era para que los desarrolladores fueran optimizando sus juegos. Intel está desarrollando varios chips de arquitectura Xe para abarcar todos los puntos de potencia habituales, por lo que si el chip de esta DG1 terminara en una tarjeta gráfica, lo más probable es que se usara con memoria GDDR6, lo que daría más ancho de banda a la tarjeta gráfica y más rendimiento en ciertas situaciones. Aunque opino (que puedo estar equivocado) que Intel orientará su primera tarjeta gráfica para juegos a algo en torno a los 150-200 euros.