La competición dura entre Intel y AMD dejará en la segunda mitad del año los Ryzen 7000 de sobremesa que es como se llamará la próxima generación a competir con los sucesores de los actuales Alder Lake de Intel. AMD solo ha dado algún detalle de ellos en el CES 2022 aunque ha mostrado el nuevo aspecto que tendrán, que es como se venía rumoreado.
Estos nuevos procesadores de AMD tendrán núcleos Zen 4, con acceso a DDR5, PCIe 5.0 y usarán un zócalo AM5 que es una forma más bonita de llamar al LGA 1718 que usarán. O sea, se cambia de la matriz de pines (PGA) de los actuales Ryzen de sobremesa a una matriz de contactos (LGA) y por tanto será un zócalo más parecido a los que usa Intel.
Estarán fabricados por TSMC con un proceso litográfico de 5 nm, pero también tendrá acceso a conectividad moderna como USB 4. La compañía llegará tarde respecto a los Core de 12.ª generación en diversos aspectos, pero lo hará con el mercado más maduro y con precios de la DDR5 que se esperan bastante mejores que los actuales.