A las decenas de rumores que giran en torno a la compra de Twitter por parte de Elon Musk hay que añadirle uno nuevo. El magnate tecnológico estaría valorando despedir al 75 % de la plantilla según una noticia del Washington Post, el periódico de Jeff Bezos que no es precisamente amigo de Musk. Este tipo de noticias, en una compra de alto nivel, suelen estar orientadas a desestabilizar la empresa antes de su venta porque, bueno, si ya había empleados saliendo de ella sin completarse, ahora podrían tomárselo en serio el resto buscando emigrar a pastos más verdes.
Twitter tiene en torno a 7500 empleados y ese recorte del setenta y cinco por ciento sería unos 5600 empleados. Un hachazo en toda regla, aunque no le vendría mal para que Twitter fuera una empresa rentable. No se entiende cómo pueden tener a tanta gente contratada para un sistema que funciona de manera automática la mayor parte del tiempo, y no es que metan novedades todos los días. Con suerte, algún pequeño cambio una vez cada semestre.
Los despidos supondrían un ahorro de 800 millones de dólares al año y se quedaría en unos 1900 empleados. Los mayores recortes de personal sería en la infraestructura y centros de datos. Varios documentos obtenidos por el Washington Post también apuntan a que la dirección planeaba grandes despidos, aunque esa misma dirección de la empresa ha salido al paso alegando que desde que se inició el proceso de venta de la compañía esos planes se han parado totalmente.
Vía: EnGadget.
