AMD sigue expandiendo el catálogo de los procesadores de arquitectura Zen 4 con los Ryzen PRO 7000, que incluye modelos tanto para portátiles como sobremesas. Empezando por los modelos de portátiles, son seis los modelos anunciados, tanto de las versiones de alto rendimiento con una TDP de 35-54 W como de los de bajo consumo con una TDP de 15-28 W, siempre configurable para adaptarse a la refrigeración del equipo concreto.
Parte del Ryzen 5 PRO 7540U de seis núcleos y termina en el Ryzen 9 PRO 7940HS de ocho núcleos, por lo que al menos inicialmente no hay modelos más baratos de cuatro núcleos.
Las mejoras de los Ryzen PRO frente a los Ryzen normales es las características adicionales de asistencia y seguridad. Eso incluye medidas adicionales de protección a la información en la nube, cifrado total de memoria, sistemas de gestión remota de los equipos con los Ryzen PRO, asistencia técnica extendida y un ciclo de producción aumentado más allá del habitual de los Ryzen para cubrir las necesidades empresariales de proyectos a largo plazo.
Otra ventaja en la que se ha centrado AMD es en las unidades de inteligencia artificial que integran sus procesadores. Eso habilita que estos procesadores sean mejores a la hora de procesar videollamadas, análisis de datos y otros, pero ahora mismo no hay casi programas que lo puedan aprovechar.
Los procesadores para los equipos de sobremesa son tres, de seis, ocho y doce núcleos por lo que no andarán faltos de rendimiento. Una ventaja de estos procesadores es la inclusión de una unidad gráfica integrada, que servirá bien para ciertos tipos de mini-PC de uso empresarial.