El culebrón que hay en torno a los Core de 13.ª y 14.ª generaciones y un mal BIOS/UEFI que los puede llegar a dañar físicamente se está resolviendo por ahora con una extensión de garantía de Intel a cinco años y una ronda de actualizaciones del microcódigo base del UEFI. Los dos primeros fabricantes en lanzar estas versiones actualizadas para sus placas base son ASUS y MSI ahora que hace unos días que Intel les proporcionó ese microcódigo. Pero Intel también ha indicado que esta actualización no reducirá el rendimiento.
Lo ha indicado la compañía en una reunión en China con diversos socios, donde ha indicado que no afectará a la frecuencias turbo de estos procesadores. Al final de lo que se trata, según ha indicado Intel previamente, es que había un mal ajuste al alza del voltaje de los procesadores que podía dañar físicamente los procesadores. Esto provocaba con el tiempo inestabilidades del turbo, por lo que tampoco hay reducción de rendimiento con este parche. El microcódigo nuevo simplemente hace que se respeten los voltajes máximos y se gestionen adecuadamente con el turbo.
Vía: Videocardz.