Intel tiene que recuperar mucho terreno que ha cedido voluntariamente en el último lustro a AMD en el terreno de los centros de datos y lo está intentando lo mejor que puede. Los nuevos procesadores Xeon 6 recién anunciados son un nuevo empujón en la dirección correcta, aunque realmente no aportan una diferenciación frente a los EPYC de AMD, pero al menos están en la misma línea.

La compañía ha anunciado seis modelos concretos para esta serie, que van desde el 6960P de 72 núcleos P de hasta 3.8 GHz en todos los núcleos, hasta el 6980P de 128 núcleos P que funciona hasta a 3.2 GHz en todos los núcleos. La potencia de diseño térmico se sitúa entre los 400 W y los 500 W según el modelo. Todos usan memoria en doce canales de tipo DDR5 a 6400 MT/s, con la posibilidad de usar dos procesadores por placa base. También cuentan con 96 canales PCIe 5.0.

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Intel promete, frente a la generación anterior, hasta el triple de rendimiento en inteligencia artificial, hasta un 150 % más de rendimiento en cómputo general, y hasta el doble de rendimiento en otras tareas como bases de datos MySQL. Los chíplets están fabricados con el proceso de 3 nm de Intel, aunque el importante para la compañía será el 18A que llegará en los Xeon del próximo año, los Clearwater Forest.

En cuanto a la aceleradora Gaudi 3, está orientada a inteligencia artificial gracias a sus 64 núcleos de procesamiento tensorial (TPC) y sus ocho motores de multiplicación de matrices. Un tensor es una estructura algebraica muy usada en aprendizaje automático, que es lo fundamental de la IA hoy en día. Estas aceleradoras integran hasta 128 GB de HBM2e según el modelo con hasta 3.7 TB/s de ancho de banda, y pueden gestionar hasta veinticuatro puertos Ethernet de 200 Gb/s.

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Fuente: Intel.