Análisis: Logitech G Pro 2 Lightspeed review en español

Logitech G sigue dándole un repaso a su catálogo de ratones con el lanzamiento del Pro 2 Lightspeed, que es un modelo bastante reconocible porque es un sucesor del Pro de hace seis años. El diseño de esta serie no ha variado casi nada, pero este modelo incluye una actualización del sensor y conectividad, con algún pequeño cambio adicional.

Desembalado

El Pro 2 Lightspeed de Logitech G llega en la habitual caja negra que usa la compañía para sus productos. Las características completas aparecen en un lateral, aunque en la parte posterior destaca las principales. Al abrir la caja se puede ver el ratón reposando en una bandeja, debajo de la cual hay un cable USB tipo A a USB tipo C, un receptor USB junto a un extensor USB tipo C para el cable para ponerle el receptor, y cuatro botones intercambiables para el ratón. Se incluyen también un manual de uso y otro de conformación legal.

El modelo recibido para analizar es de color rosa chicle, aunque también está disponible en negro y blanco. La forma del ratón es la habitual de esta serie y que me parece bastante buena para los agarres de yemas y garra, aunque se pueda usar también con el de palma, si bien como siempre dependerá del tamaño de la mano que se tenga y de la forma específica en que se agarre. Al principio lo estaba usando con garra porque tengo la mano grande, pero poco a poco fui adaptándolo a uno de palma, el que suelo usar, girando un poco el ratón. En general no lo veo mal para cualquier tipo de agarre.

Cuenta con tres ledes en la parte superior para indicar el estado de la conexión o el nivel de batería, junto con las dos amplias zonas de los botones principales. Se puede pulsar fácilmente y sin problemas incluso donde termina cerca del ápex del ratón. Hay un logo de Logitech G en el reposapalma que cuenta con iluminación RGB de alto brillo y totalmente configurable. Los interruptores de estos botones son ópticos con sensación de mecánicos.

El diseño del ratón es simétrico por lo que se puede usar tanto por diestros como zurdos. Los botones extras son para los dos botones de cada lateral. En realidad, para cada lado hay un juego de botones que sobresale y otro juego que queda a ras de la superficie del ratón por lo que en la práctica es una tapa que invalida el uso de los botones. Personalmente he preferido poner los cuatro botones, porque solo dos me parece escaso.

Los botones tienen un clic suave y un sonido ligeramente agudo que es muy agradable y que no es especialmente alto. La ruedecilla del ratón da muy buena sensación de uso y es totalmente silenciosa, aunque se nota perfectamente cada muesca que tiene en su recorrido. No ha cambiado demasiado frente a modelos anteriores como el Pro X Superlight 2 del año pasado con el que comparte prácticamente todo el diseño y características.

En la parte inferior se pueden ver cuatro almohadillas de teflón un poco estrechas y una cuarta en torno al sensor del ratón. Desliza bastante bien sobre cualquier superficie, pero ciertamente no es el que mejor desliza de los que he probado. El mencionado Pro X Superlight 2, entre que es un poco más ligero y tiene dos amplísimas almohadillas, desliza bastante mejor.

Aquí también se puede ver una tapa redonda de fijación magnética en la que iría el cargador inalámbrico de PowerPlay que se compra por separado, pero que sirve para guardar el receptor USB. Por último, hay un botón para cambiar entre cinco niveles de sensibilidad del ratón, aunque todo es configurable en el programa Hub de Logitech G del que hablaré más abajo. En la parte frontal del ratón hay una toma USB tipo C, que ya es obligatoria en la UE.

Características

El PRO 2 Lightspeed es un modelo de tamaño tirando a grande, y no especialmente alto, aunque tampoco es especialmente bajo. Mide 125 mm × 63.5 mm × 40 mm, que junto a su forma sirve bastante bien para cualquier agarre, aunque principalmente es un ratón para garra o yemas. Su peso es de 80 g, por lo que no se nota especialmente pesado.

El sensor incluido es un Hero 2 que mejora el anterior, aunque la mayoría de jugones no van a notar la diferencia, y menos en el día a día. Aun así, se trata de un sensor con una sensibilidad de 32 000 PPP, con una velocidad de 500 PPS y una aceleración de 40 G. Es una buena elección para este ratón. Se puede ajustar en incrementos de un píxel por pulgada si se quiere. Eso beneficia a la hora de calibrar el sensor para ciertas superficies, aunque al ser óptico no se puede usar sobre cristales, por ejemplo.

Quizás lo más importante en cuanto a tecnologías sea que el muestreo del ratón se hace a 4000 Hz por cable o 1000 Hz por el receptor USB incluido, por lo que aunque sea un modelo inalámbrico igual de vez en cuando algún usuario prefiere usarlo por cable. Prácticamente no noto mucho la diferencia entre uno y otro, pero se nota algo más fluido, sin ser significativo para mí. Otros lo notarán más, pero esto son cuestiones personales.

Los interruptores principales son optomecánicos de tipo Lightforce de la propia Logitech. Esto quiere decir que la activación se hace mediante el corte de una barrera infrarroja, pero la sensación táctil de la pulsación es igual a la mecánica, o al menos esa es la intención de Logitech G. El resultado final en el día a día es que tiene un clic agradable, con un ruido bajo, y que permitirá registrar todos los clics debido a que no necesita un tiempo de rebote como los puramente mecánicos.

En cuanto a la batería incluida, Logitech G indica que dura hasta 95 h sin la iluminación RGB o 60 h con ella. En la práctica me ha durado más con la iluminación RGB, en torno a las 64 h hasta llegar al 5 % de nivel de batería, momento en el que el ratón ha empezado a desconectarse de vez en cuando. Es un comportamiento normal con la batería baja en este tipo de dispositivos, por lo que lo puse a recargar en ese momento. Por tanto podrá aguantar en torno a una semana usándolo unas diez horas al día con el brillo por defecto —efecto 'fijo'—, o cinco o seis días con un brillo medio-alto y algún efecto como el 'ciclo' de color al 40 % de brillo.

Progama de configuración

El programa de configuración es Hub de Logitech G, y está disponible tanto para Windows como para macOS. En mi caso lo he probado principalmente en este último, y no he echado en falta ninguna característica frente a Windows. Es uno de los alicientes para que los maqueros compren los productos de Logitech, porque otras compañías importantes como Razer no tienen su aplicación para macOS.

La pantalla de inicio mostrará los productos que se tenga de Logitech G, con información como el estado de la batería o la capacidad de activar los perfiles de memoria en lugar de los ajustes a través de la aplicación. La primera pantalla tiene que ver con la gestión del sensor, con cosas como la sensibilidad en cinco niveles distintos, la distancia de separación, o el muestreo, entre otros. Se proporcionan perfiles para distintos tipos de juegos y tareas.

La siguiente pantalla tiene que ver con la asignación de acciones a los botones, y en esto es muy variado, desde las acciones multimedia a lanzamiento de aplicaciones, macros, etc., todo de una forma fácil de entender y bastante cómoda. Se puede activar la tecla G-Alt, que es asignar a una tecla del teclado, por ejemplo, la activación de un segundo conjunto de acciones de los botones, por lo que en la práctica se podrían tener hasta ocho acciones asignadas a estos botones.

La última pantalla es la de la iluminación RGB del logo del reposapalma y que, bueno, se elige el color un efecto y el nivel de brillo y poco más. Hay también un apartado para añadir la cuenta que se tenga de Logitech G en la que se guarda la configuración del ratón para tenerla disponible en otros equipos, y otro de opciones más generales en la que se indica el nivel de consumo del ratón y la estimación de uso, entre otros. La aplicación funciona perfectamente y es bastante completa, por lo que siempre es un aspecto positivo a tener en cuenta a la hora de elegir un periférico.

Un clásico mejorado

Logitech G está renovando sus ratones para jugones, ahondando en el diseño del Pro de hace unos cuantos años, y ahora le ha tocado el turno al Pro 2 Lightspeed. Hay un cambio importante en el diseño como son los botones de quita y pon de los laterales, porque junto a su diseño simétrico hace que sea una buena opción para zurdos frente a solo diestros como es el diseño del Pro o el Pro X Superlight 2. Pero con este último para los diestros tampoco es que haya muchas diferencias de características, con mismo sensor y solo mejora a 4000 Hz el sondeo del puerto USB.

Sigo echando en falta la incoporación de Bluetooth a este diseño de ratón, y con un PVPR de 140 euros no es como para no incluirlo. Bien es cierto que el PVP bajará previsiblemente bastante rápido e igual en dos o tres meses se le podrá encontrar sobre los 110-120 euros, pero de lanzamiento no es un ratón tan interesante. Por eso siempre insisto en que no hay que valorar el PVPR sino en el PVP que tenga un producto en el momento de ir a comprarlo.

Y más allá de esto, el Pro 2 Lightspeed es un gran ratón para los jugones que quieran este diseño específico que está más orientado a agarres con yemas o garra, aunque también se podría usar con la palma, lo cual dependerá del tamaño de mano que se tenga y el agarre específico. El sensor es muy preciso, y el sondeo a 4000 Hz por cable es un buen añadido, aunque la mayoría de jugones apenas lo notará. Es un nuevo ratón de Logitegh G que es muy de Logitech G, por lo que tampoco tengo más que añadir a lo que vengo diciendo en los últimos años.

Puntuación