Desde que Microsoft anunciara la compra de Activision Blizzard King, en la dirección de Sony han estado inquietos. Una compra de tal magnitud sin duda va a tener un impacto en el negocio de la japonesa, aunque siga teniendo un volumen de mercado mayor en el sector de los videojuegos. Pero prevén que la adquisición les reduzca los ingresos en unos 1800 millones de dólares para 2027, aunque haya otros motivos de fondo.
Esa pérdida proceden mayormente de los suscriptores de PlayStation Plus que puedan cambiar de plataforma. Pero también reconoce que los fundamentos de Sony están anticuados y por detrás de la competencia, lo cual es el reconocimiento de un hecho, aunque solo haya sido internamente. De ahí además que Sony esté pisando el acelerador a la hora de portar sus juegos de Windows.
La información procede de una trasparencia de lo filtrado en el jaqueo a Insomniac, por lo que no es un rumor sino información interna de Sony porque Insomniac es uno de sus estudios de desarrollo de videojuegos. Este escenario es el más pesimista, porque además adelante el bajón de ventas por Call of Duty a 2027 en lugar de los diez años prometidos por Microsoft de paridad entre Xbox y PlayStation para fechas de lanzamiento y contenido de juegos. Pero una vez cerrada la fusión, Microsoft puede no cumplir con lo prometido porque, bueno, la fusión no se puede echar atrás. Le podrán multar, pero si consigue quitarle 1000 M$ a Sony para pagar una multa de 500 M$, sale ganando. No es la primera vez que una compañía incumple lo prometido a los gobiernos tras una fusión.
Vía: TechSpot.
