Intel ha presentado finalmente los primeros procesadores Skylake según lo planeado. Es la sexta generación de procesadores Intel Core, que curiosamente va a convivir con la cuarta y quinta generación, dando un punto extra de variedad y complicación a la hora de elegir qué procesador comprar para un nuevo equipo.
Chipset Z170
Skylake es la generación de procesadores fabricados con transistore de 14 nm, y que incluye algunas novedades interesantes gracias al nuevo chipset Z170, aunque no demasiadas. Estos procesadores necesitarán un nuevo socket LGA 1151 para que las placas puedan aprovechar las nuevas características que incluye.
Por ejemplo acepta hasta tres unidades M.2 funcionando a PCIe x4, acepta memoria DDR4 de doble canal de 1,5 V y 2133 MHz y DDR3L de 1600 MHz y 1,35 V (dependerá de la placa que compremos), pero las vías de PCIe se mantienen igual (1x PCIe 3.0 x16, y subcombinaciones, para gráficos y hasta 20 vías PCIe en total), por lo que no habrá mejoras de cara a futuro en el SLI/CrossFire. Añade, eso sí, diversas características para empresas que resultan interesantes y que de esta forma evita tener que adquirir placas Q87 específicas para ello (SPI, Intel vPro, o gestión de dispositivos de Intel), o el equivalente para ello en Skylake, las Q150.
El chipset cuenta con soporte para USB 3.1 (10 Gbps), HDMI 2.0 (vídeo 4K), Thunderbolt 3, DisplayPort 1.2 y DockPort a través de Alpine Ridge, el controlador E/S que se incluye en la nueva arquitectura Skylake, y son características que no se encontraban anteriormente integrados en los procesadores Intel. Los fabricantes de placas podrán usar sus propios controladores, o los de Intel como el ASM1142 o I219 para la controladora Ethernet.
Nota: como curiosidad el chipset Z170 no permitirá utilizar por defecto USB 2.0 Enhanced Host Controller (EHCI) de Windows 7, por lo que habrá que recurrir a XHCI. EHCI ha sido eliminado de los Skylake. Esto significa que Windows 7 se tendrá que instalar desde una unidad óptica, no se podrá hacer desde una llave USB (pendrive).
Mejora incremental
Los primeros procesadores en llegar son los Core i7-6700K y Core i5-6600K. La mejora del IPC (instrucciones por ciclo) es incremental, y se sitúa entre un 5 y un 10% más. Con un TDP de 91 W, lo más probable es que la mejora real provenga de las capacidades de overclocking, ya que el 4790K tiene un TDP de 84 W.
De hecho se pueden realizar incrementos en Skylake de 1 en 1 MHz para afinar al máximo posible las capacidades del chip concreto que nos toque al comprarlo. Ahora mismo hay informes de que se puede poner a 5 GHz y que se trata de una arquitectura limitada por calor más que por voltaje, por lo que se podrían obtener frecuencias de funcionamiento incluso superiores con una buena refrigeración.
Además, el regulador de voltaje se ha vuelto a poner en las placas en vez de en el chip, por lo que habrá que estar todavía más fino a la hora de elegir la placa a usar en el overclocking de los Skylake, pero a su vez ayuda a mejorar el potencial de overclocking de esta sexta generación Intel Core.
La gráfica integrada en ambos es una Intel HD 530 con frecuencias de 350 MHz, con turbo de 1200 MHz. Cuenta con una variante de la arquitectura GT2 de 9ª generación con soporte a OpenCL 2.0 y 24 unidades de ejecución.
El i7-6700K funciona a 4 GHz con turbo de 4,2 GHz con 8 MB de caché L3, y el i5-6600K a 3,5 GHz y turbo de 3,9 GHz con 6 MB de caché L3. Son procesadores desbloqueados, con un aumento del ancho de banda a 64 Gbps (8 GB/s) para gestionar una mayor cantidad de dispositivos ultrarrápidos. Cada M.2 con interfaz PCIe x4 (cuenta con soporte nativo a NVMe) puede superar los 2 GB/s de transferencia, y el aumento de este ancho de banda desde los 32 Gbps es lo que quiere resolver.
Todos los detalles técnicos de los nuevos chipsets y procesadores los dará Intel en el IDF 2015 el 18 de agosto.
Disponibilidad y precio
El precio será de 350 dólares por el Core i7-6700K y 243 dólares por el i5-6600K, y la caja no incluye ventilador. Como referencia, el i7-5775C tiene un precio de 377 dólares, y el i7-4790K de 350 dólares. No se ha indicado cuándo estarán disponibles, pero seguramente a finales de mes tras el IDF 2015.
Están ya a la venta, pero os recomiendo esperar si queréis cambiar de equipo, o pagaréis la novedad. El i7-6700K se sitúa en los 405 euros, pero es un precio claramente motivado por una baja oferta puesto que apenas han llegado unidades a los distribuidores y tiendas. Su precio debería situarse más en la línea del 4790K en unas semanas, y antes de octubre que subirán los precios.
Vía: AnandTech.