Intel está actualmente muy interesada en que el sector del Internet de las cosas (IoT) evolucione lo más rápido posible, y para ello necesita nuevas ideas y nuevos chips. El primer apartado lo ha cubierto recientemente con la compra de Movidius, una empresa dedicada a sensores para el Internet de las cosas, y el segundo lo cubre ahora con la presentación de los nuevos procesadores de la serie Atom E3900.

Estos procesadores están orientados a proporcionar un alto rendimiento en comparación con soluciones anteriores que había presentado, y que llega en tres modelos: Atom x5-E3930 de doble núcleo a 1.8 GHz y GPU de 12 unidades de ejecución (UE); Atom x5-E3940 de cuatro núcleos a 1.8 GHz y GPU de 12 UE; y el Atom x7-E3950 de cuatro núcleos a 2.0 GHz u 18 UE. Los núcleos son de tipo Goldmont, basada en la plataforma Apollo Lake con los chips fabricados a 14 nm, y las GPU son de novena generación.

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Su consumo se sitúa entre los 6.5 W y los 12 W, adecuado para los dispositivos en los que Intel tiene en mente que se utilicen. Esos incluyen máquinaria de fábrica que necesite estar conectada, pero también cámaras de vídeo conectadas a Internet y otros dispositivos del Internet de las cosas que necesiten determinar el tiempo de manera exacta. Intel añade en estos procesadores un sistema de medición del tiempo de arranque del sistema para determinar por ejemplo si pudiera haber sido comprometido.

Sobre la determinación del tiempo, es para usos de trabajo en tiempo real. Si en una planta hay varios brazos robóticos trabajando al unísono y están conectados por red, necesitan determinar de manera precisa el instante en el que deben intervenir. Con estos procesdores lo podrán hacer con una precisión de 1 µs mejorando la sincronización mediante la tecnología de coordinación de computación, y con ello se ha ganado el apoyo de varios fabricantes importantes.

Vídeo

Las GPU de estos procesadores pueden mover hasta tres monitores 4K, y manejar la descodificación de hasta 15 flujos de vídeo 1080p a 30 FPS para sistemas de monitorización. Los chips se pueden acompañar de dos módulos de memoria LPDDR3 o LPDDR4 a 2133 MHz, y gestionan varios puertos USB 3.0.

Intel también proveerá de una versión Atom A3900 orientada a los sistemas de coches conectados y conducción autónoma, y en general es específica para el sector automovilístico para cualquier uso que le puedan encontrar, pero sobre todo centrada en el procesamiento de imágenes. Ejemplos de uso se encuentra la gestión de los sistemas de infoentretenimiento del vehículo, instrumentación digital y sistemas de asistencia a la conducción. Estará disponible en el primer trimestre de 2017.

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Vía: AnandTech.