AMD ha dado un giro no demasiado inesperado en la presentación del chipset B550 y los nuevos Ryzen 3 3100/3300X al actualizar la tabla de compatibilidad de chipsets y procesadores de la compañía. Si bien la información de la siguiente transparencia es una recomendación por parte de AMD, esta indica que los próximos Ryzen de sobremesa con arquitectura Zen 3 solo serán compatibles con las placas base X570 y B550.
AMD optó por decir que el zócalo AM4 se mantendría varias generaciones de procesadores en el mercado, pero eso tiene sus problemas. Por ejemplo, que si bien a una con chipset B350/X370 se le puede poner un procesador de 1.ª y 2.ª generación Ryzen, la 3.ª generación requiere de una actualización especial del BIOS, y la 4.ª generación directamente no va a ser compatible con el chipset. Puede que algún fabricante opte por permitir esa compatibilidad si hay espacio en el chip del BIOS, pero como ha ocurrido con la 3.ª generación, eso puede implicar un recorte de prestaciones del BIOS, de la interfaz, o dejar atrás la compatibilidad con alguna generación de procesador Ryzen.
De hecho, el nuevo chipset B550 anunciado por la compañía solo es compatible con los procesadores Ryzen de 3.ª generación, por lo que habrá que tener mucho cuidado a la hora de elegir un procesador antiguo, un Ryzen 1000 barato por ejemplo, con la esperanza de comprar luego un Ryzen 4000 para aprovechar que el B550 aporta canales PCIe 4.0. Eso no va a ser posible, lo que resta versatilidad al zócalo AM4 y complica la elección de placa base. Algo así ha ocurrido en las últimas cuatro generaciones de procesadores de Intel en las que se mantuvo el zócalo LGA 1155 pero había que mirar el chipset para ver cuál es compatible con qué.