Análisis: Swift 3 SF314-59 de Acer

El sector de los ultraportátiles tiene un gran aliado en los procesadores Tiger Lake de Intel debido a su buena potencia, bajo consumo y decente potencia gráfica. Eso convierte a los ultraportátiles con pantallas de 13 o 14 pulgadas en modelos muy buscado, y Acer lleva trabajando en ellos en los últimos años. El Swift 3 es uno de los máximos exponentes de este tipo de equipos.

El diseño ha sido cuidado haciendo uso del aluminio como pieza base, y el peso del portátil se sitúa en solo 1.19 kg. Con una buena pantalla y una buena conectividad, bastante actual que incluye un puerto Thunderbolt 4, de entrada el Swift 3 (SF314) da muy buena impresión.

Inspección visual y características

El Swift 3 llega en la habitual caja de portátiles en la que se combina un apartado para la fuente de alimentación externa y el portátil debidamente protegido en otra caja o sección. En este caso no es distinto. La compañía usa cartón reciclado para ambas, aunque con la habitual cantidad de plástico para proteger los cables, fuente y portátil.

El equipo destaca por su diseño nada más sacarlo de la caja ya que tiene una carcasa de aleación de aluminio y magnesio agradable al toque y además es un equipo muy ligero con 1.19 kg. Su tamaño también es reducido, pensando en la portabilidad, con 323.4 mm × 218.9 mm × 15.95 mm. Es un ultraportátil que puede ser bastante buscado por aquellos que necesitan un portátil para ir de un lado a otro pero no quiere cargar todo el día con algo especialmente pesado.

La pantalla del equipo es adecuada para el tipo de equipo que es, incluso buena, si bien no es un producto para profesionales sino generalista. Su tamaño es de 35.5 cm de diagonal de tipo IPS con una resolución de 1920 × 1080 píxeles. Bastante comedida de resolución y características pero que sirve perfectamente para su propósito. Cubre la escala de color sRGB y en general es de bastante buena calidad para el precio del equipo. No alcanza mucho brillo máximo, sobre los 300-350 nits, pero la calidad de color está bien aunque solo la usaría para trabajo profesional ligero. En la parte superior de la pantalla hay una cámara web HD de calidad normalita, con micrófono de igual calidad normal.

El procesador del equipo es un Core i5-1135G7 con una unidad gráfica integrada de tipo Iris Xe G7. Hablo más sobre ellos en su propio apartado por lo que no me detengo en este terreno. El modelo recibido para analizar incluye 16 GB de memoria LPDDR4X a 4266 MHz soldado en la placa base, y hay una ranura M.2 2280 poblada con una SSD de tipo PCIe 3.0 ×2 de 512 GB, un modelo de Kingston. El modelo base tiene 8 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento.

El sistema de sonido que le acompaña es de calidad media, ni bueno ni malo, pero en este tipo de productos debería ser mejor. Están en la parte inferior del equipo, mala localización siempre. Alcanzan mucho volumen pero empiezan a introducir ruido en cierto punto. A volumen moderado suenan bastante bien, pero se nota ligeramente enlatado. Es algo habitual en portátil baratos por lo que tampoco se le puede echar excesivamente en cara, pero hay que tener en cuenta que son unos altavoces estéreo normalitos.

En cuanto al teclado, agradable de usar pero es un modelo que se nota económico. El modelo recibido para analizar es con el teclado inglés pero se vende en España con la disposición española. Integra el botón de arranque en una hilera específica de teclas de función en la parte superior del teclado, y en la zona de cursores los de derecha/izquierda están partidos para incluir las teclas de avanzar/retroceder página.

Se pierde una tecla respecto a la disposición europea, la de la tecla mayor/menor que tanto usamos los programadores, ya que llega con la disposición estadounidense con el intro largo de una sola fila. También según el modelo comprado tendrá o no retroiluminación, por lo que es algo a tener en cuenta ya que además el modelo con iluminación tiene mejores interruptores para mejorar la sensación de tecleo.

En la parte inferior del teclado, fuera de él, hay un lector de huellas dactilares para desbloqueo rápido de Windows 10 a través de Windows Hello. Funciona razonablemente bien y es rápido. El panel táctil es un modelo normal, preciso pero ciertamente no da la estupenda sensación de los incluidos en modelos más caros con recubrimiento de cristal. Es razonablemente bueno para su uso en el día a día, pero se preferirá usar el Swift 3 con un ratón Bluetooth a llevar junto al portátil.

Para la conectividad inalámbrica incluye wifi 802.11ax, ahora llamada Wi-Fi 6 por temas de mercadotecnia, y Bluetooth 5.0. En cuanto a los conectores, en el lateral izquierda incluye un HDMI 1.4, un USB 3.0, un conector de cargador circular, un Thunderbolt 4, compatible con carga, datos y vídeo, pudiéndose utilizar con una tarjeta gráfica externa. En el lateral derecho hay una toma de audio de 3.5 mm, otro USB 3.0, el indicador de que está encendido y está recargando la batería, y un cierre de seguridad Kensington.

Por cierto que la batería es de 48 W, con una versión con 56 Wh, y se proporciona un cargador de 65 W. En la parte inferior se puede ver la rejilla principal para el único ventilador incluido de extracción trasera del aire. Opcionalmente se puede recargar mediante el conector USB tipo C, por ejemplo de los usados por ciertos monitores que incluyen también un concentrador USB y señal de vídeo. O una carcasa de tarjeta gráfica externa, que también pueden dar hasta 100 W de carga a un equipo conectado. Es agradable que el Swift 3 tenga un Thunderbolt 4 con características completas, sobre todo porque es el típico modelo económico usado en el sector empresarial donde los monitores que hacen de base de carga con un USB tipo C están a la orden del día.

Rendimiento del procesador

El procesador de este equipo es un Core i5-1135G7, uno de los denominados Tiger Lake de bajo consumo (Tiger Lake U), y como el resto de la serie tiene un máximo de cuatro núcleos. Es un procesador con chips fabricado a 10 nm de nueva arquitectura por lo que se nota sobre todo en la potencia mononúcleo. Es un modelo que precisa apenas 28 W de potencia de diseño térmico para el sistema de refrigeración, lo que significa que es de bajo consumo.

Tiene multihilo simultáneo (SMT) que en el caso de Intel lo llama HyperThreading, por lo que el procesador puede ejecutar cuatro hilos a plena potencia y otros cuatro a bastante menor potencia. Beneficia a las tareas multihilo como programas profesionales, renderizado, cómputo, pero tiene menos utilidad en juegos que suelen depende de cuantos más núcleos potentes mejor. Este modelo de procesador funciona a una frecuencia base de 2.4 GHz y a un turbo de 4.2 GHz, y se beneficia de la memoria LPDDR4X a 4266 MHz que lleva integrada la placa base del portátil.

En cuanto a la unidad gráfica integrada, se trata de una Tiger Lake GT2, más conocida como Iris X^e G7, funcionando hasta a 1300 MHz. En este caso por el procesador que es está configurada con 80 unidades de ejecución en lugar de las 96 que tienen otros procesadores Tiger Lake como el Core i7-1165G7. Eso reduce los sombreadores a los 640 en lugar de 768, pero su potencia de cómputo se reduce a 1.7 TFLOPS en lugar de 2 TFLOPS.

Es una potencia adecuada para una integrada de este tipo hoy en día, y puede mover juegos a resolución FHD y calidad baja a 60 f/s. Eso sí, si no son demasiado punteros. Juegos como Shadow of the Tomb Raider o Far Cry 5 funcionarán más hacia los 30-40 f/s, pero otros como The Witcher 3 podrán tener sobre 60 f/s. Los juegos de deportes electrónicos como DotA 2 o League of Legends podrán funcionar a FHD en calidad alta y 60 f/s sin problemas, incluso se podrían ir bastante por encima de ello para aprovechar un monitor externo con una mayor tasa de refresco.

Para cargas de trabajo algo más profesionales también servirá, moviendo bastante bien ciertos filtros 3D de Photoshop, pero sin muchas alharacas. Sin embargo, la inclusión de un Thunderbolt 4 pone las cosas bastante bien para usar una tarjeta gráfica externa. De hecho he probado el equipo con una RX 6800 XT externa en una caja Cortex de Razer, probablemente la mejor por su bajo precio y buena calidad.

Dejando a un lado los problemas de tener una conexión PCIe 3.0 ×4 a través de Thunderbolt 4, lo cual limita notablemente la potencia de la RX 6800 XT, por cómo funciona Thunderbolt no se va a obtener tanto rendimiento que si estuviera conectada directamente al equipo. Aun así, se puede jugar a FHD en calidad ultra y 60 f/s a Shadow of the Tomb Raider y otros juegos similares en la pantalla del portátil. Thunderbolt 4 ha solucionado bastantes problemas de Thunderbolt 3, incluida la latencia, y en general va mejor. No va perfecto, pero como solución para jugar en casa en un ultraportátil ese puerto Thunderbolt 4 es ideal.

Autonomía y almacenamiento

La autonomía del portátil con la batería de 48 Wh incluida en este modelo —hay otros con 56 Wh— es bastante buena y es el principal reclamo de la compañía y la propia Intel. Con la pantalla a unos 150 nits se puede conseguir en torno a las nueve o diez horas de uso de pantalla en ofimática con alguna reproducción de vídeos por wifi. Si se reproduce solo vídeos tirando de wifi puede durar en torno a las seis horas. En general no es una autonomía que sorprenda a nadie pero es buena teniendo en cuenta la pequeña batería de 48 Wh. El modelo de 56 Wh incluye certificado Evo de Intel y ofrecerá a ese 15 % extra de autonomía acorde a su mayor capacidad.

En cuanto a la unidad de almacenamiento, este modelo base del Swift 3 incluye una unidad de Kingston con PCIe 3.0 ×4 pero que funciona más bien a ×2 y por tanto solo llega a 2 GB/s de transferencia secuencial.

Eso sí, puesto que la ventaja de las unidades PCIe está más en el rápido acceso y la buena transferencia de archivos de pequeño tamaño (acceso aleatorio), al final si bien el resultado en lectura/escritura secuencial no llega a las de las mejores PCIe 3.0 ×4 en lo referente a la lectura/escritura aleatoria está en la línea del resto de unidades PCIe. El equipo va rápido, se despierta en segundos y no se nota nada raro en el día a día.

Temperaturas y ruido

El sistema de refrigeración cuenta con un solo caloducto, pero en general resulta un ventilador silencioso incluso jugando, si bien el calor en esa situación se dispara. El teclado puede llegar a los 37-38 ºC —ahora en verano en el momento de analizar esto con la habitación a 31 ºC—, pero se podrá usar el teclado sin problemas. La zona de las teclas WASD alcanzar algunos grados menos. La zona inferior del portátil puede llegar a 40 ºC en estos momentos calurosos del año.

El propio procesador en Cinebench R23 se va a los 93 ºC en carga completa con un consumo de 32 W, si bien tras pasar el tiempo de consumo máximo se estabiliza en los 28 W y a una temperatura de 85 ºC. Teniendo en cuenta que la máxima temperatura de funcionamiento del procesador es de 100 ºC, se queda a cierta distancia. Es habitual que en los ultraportátiles el procesador funcione a mayor temperatura ya que el sistema de refrigeración suele ser más limitado y se busca igualmente que no hagan demasiado ruido.

En cuanto al ruido, el ventilador es inaudible con una carga normal del procesador. Cuando se exige más al procesador, por ejemplo en juegos, ya sí que se le puede escuchar pero no es un gran ruido tampoco como en los equipos baratos o en los de juegos económicos. En esta situación el ruido se puede ir a los 37 dB por lo que se notará su presencia pero es totalmente tolerable. El ventilador genera más bien un sonido apagado en lugar de tender a los agudos como ciertos modelos de bajo coste, por lo que es un apartado bien cubierto. Tampoco es un procesador ni un equipo que requiera de una gran refrigeración, pero está bien resuelta.

Ultraportabilidad versión económica

Acer cuenta con algunos de los ultraportátiles más interesantes del mercado, no ya porque tengan las mejores características a cualquier precio —que también los tiene—, sino porque intenta equilibrar distintos aspectos para apelar a la máxima cantidad de compradores independientemente de si se pueden gastar mucho o poco en el equipo. El Swift 3 SF314-59 es precisamente un equipo orientado a un punto de precio más bajo, y de hecho el modelo con un Core i5, 8 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento cuesta 699 euros. El modelo analizado con 16 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento cuesta 799 euros.

El modelo base tiene buen diseño, es ligero, tiene buena pantalla y buena autnomía. El procesador Core i5-1135G7 y su unidad gráfica integrada le dan un buen rendimiento tanto en un uso ofimático y multimedia como en juegos, por lo que no hay nada que objetar por ese lado. Lo que hay que tener en cuenta es que hay varios modelos, unos con mejor autonomía y teclado retroiluminado por ejemplo, pero son modelos más caros.

Hay algún aspecto que Acer podría mejorar en estos ultraportátiles económicos, como por ejemplo el sistema de audio, que no creo que costara tanto hacer otro diseño de altavoces sin que saliera solo ligeramente más caro de fabricar. Pero en su conjunto, el Swift 3 SF314-59 es uno de los mejores ultraportátiles económicos del mercado y uno a tener en cuenta cuando se vaya a comprar uno nuevo, sobre todo en este época de las campañas de la vuelta a clase y la vuelta al curro.

Puntuación