Intel sus cuentas del cuarto trimestre de 2021 que presentan una bajada en beneficios aunque con un ligero repunte de ingresos. Pat Gelsinger ha achacado el regular resultado en el grupo de Computación de Cliente a la escasez de chips, que sobre todo ha afectado al sector de los portátiles y menos al sector de los equipos de sobremesa.
El problema de la escasez de chips o, dicho de otra forma, la sobredemanda actual que no se está cubriendo con la producción que hay, se extenderá hasta 2023. Intel considera que los problemas de suministro continuarán durante 2022 aunque se irán consiguiendo avances hacia la normalización de la situación a medida que pasen los meses.
Sobre todo van a mantenerse los problemas de sustratos, obleas y en la propia producción de los chips. Entre los semiconductores con mayores problemas de sobredemanda están los controladores de energía o los controladores de pantallas.
En cuanto a la disponibilidad de sus procesadores Alder Lake para portátiles, asegura que ya ha enviado los primeros lotes de chips a 140 clientes en treinta países. También ha enviado más de cien millones de procesadores Tiger Lake, los Core de 11.ª generación para portátiles, mini-PC y todo en uno.
Vía: PC World.