Meta sigue mejorando sus gafas de realidad mixta, en esta ocasión poniendo en el mercado un modelo bastante más económico de lo que tiene acostumbrado la compañía. Son las Meta Quest 3S, que parte de los 330 euros, teniendo en cuenta que incluyen las propias gafas, los mandos y el cargador. Son un modelo autónomo, que es la norma ahora mismo, por lo que no necesitan ningún otro equipo para funcionar. Su diseño es similar a las Meta Quest 3, con cambios al sistema de cámaras.
En este modelo hay solo una pantalla con una resolución reducida por ojo de 1832 × 1920 píxeles, con una cierta reducción en el campo de visión 96º/90º en lugar de 110º/96º, con unas lentes de Fresnel en lugar de plana —llamada coloquialmente crep, panqueque o tortita—. El peso es similar, 514 g, y su refresco es de 120 Hz. El procesador es el mismo Snapdragon XR2 Gen 2 con mismo 8 GB de RAM. La batería en este caso supuestamente tiene una autonomía de dos horas y media.
El modelo de 128 GB cuesta 330 euros, mientras que el de 256 GB cuesta 440 euros, y se proporciona una copia de Batman: Arkham Shadow por su compra. Se venden otros accesorios, que es donde puede hacer dinero la compañía. Hay una Correa Élite de 80 euros, una Correa Elite con Batería por 150 euros, y un estuche de Meta Quest por 80 euros. O sea, correa, batería y estuche añadirían al precio otros 230 euros. Casi que prefiero reaprovechar la batería externa que tengo para el portátil que entrega hasta 65 W y guardarlas en el cajón que saldrá más barato.
Meta también ha reducido el precio de las Quest 3, que ahora pasan a costar 480 euros por el modelo de 128 GB y 550 euros por el de 512 GB, lo cual supone un recorte de 70 euros y 150 euros respectivamente.
Fuente: Meta.
