Aunque la energía nuclear se deteste en un sector de la población, el actual modo de vida occidental es imposible de mantener sin ella. Es una energía limpia, y teniendo en cuenta que hay cientos de reactores distribuidos por todo el mundo y que no precisamente explotan todos los días ni todas las décadas, son altísimamente seguros. Así que son catalogados como energía ecológica y por tanto las grandes empresas han dado pasos para adoptarla para sus centros de datos. La última, Google, en un acuerdo de construcción con Kairos Power, una joven empresa estadounidense.
Esta empresa ha puesto el foco en la creación de pequeños reactores nucleares refrigerados por sal de fluoruro fundida por lo que no necesitan estar al lado de ríos como ocurre con las centrales tradicionales. En este terreno ha avanzando mucho el sector en los últimos años, incluida China, que ya está construyendo la primera central de sal fundida para explotación. En el caso de Kairos, sus centrales usarán un combustible en forma cerámica y prometen una seguridad aún mayor en su operación que las centrales nucleares porque no necesita electricidad para hacer la refrigeración en caso de la parada del reactor y por ser un reactor de baja presión.
El acuerdo entre Google y Kairos cubre la construcción de seis reactores que terminarán de construirse entre 2030 y 2035. Al ser reactores pequeños, sus partes se pueden crear directamente en fábricas, lo que permite la fabricación en masa. Los reactores producirán en torno a 500 MW de energía nuclear a la red eléctrica para usar en los centros de datos de la compañía. Solo necesitan los permisos gubernamentales para la construcción, los cuales esperan obtener antes de 2027.
Vía: EnGadget.