El decepcionante aprovechamiento que hacen los últimos procesadores Core Ultra 200S de Intel a FHD de la RTX 4090 ha hecho que se mire masivamente a los procesadores de AMD. Como si todo el mundo jugara a FHD con una RTX 4090 —casi nadie lo hace—. Pero Intel aseguró que había algunos problemas que evitaban que los Core Ultra 200S dieran el rendimiento que tenían previsto, y el primer parche del microcódigo base de las UEFI ya está en manos de los fabricantes de placas base.
Según Intel, con este parche se solucionan cuatro de los cinco problemas detectados, por lo que queda un quinto que será resuelto en un parche de microcódigo que estará disponible en enero. Ahora ya solo es cuestión de lo diligentes que sean los fabricantes de placas base para crear las versiones de UEFI.
Dos de los problemas han sido resueltos directamente en Windows porque tenía que ver con los estados de energía del procesador y el planificador de hilos, lo que llevaba a un aumento esporádico de latencia de la RAM y a una pérdida de rendimiento en la actualización 24H2 de Windows 11 frente a la 23H2. El otro problema tenía que ver con el programa Application Optimization (APO) que permite extraer bastante más rendimiento en ciertos juegos, pero no al usar un Core Ultra 200. Otro sí es de la UEFI que afectaba a la latencia de RBAR, APO, límites de consumo, y otras características que tenía que afinar Intel. El último tenía que ver con Easy Anti-Cheat, y ha sido corregido por Epic Games.
Así que solo queda un último fallo detectado —que podría haber más— que tiene que ver con la UEFI, sin especificar más, y que aumentará el rendimiento en juegos en un porcentaje de un solo dígito. Así que tocará a mucha gente volver a probar el Core Ultra 9 285K en juegos cuando lleguen los parches de las UEFI de las placas base.
Vía: Tom's Hardware.