Intel llevaba unas décadas siendo el mayor fabricante de semiconductores del mundo, mirado siempre por volumen de ingresos, pero Samsung le arrebató en 2018 el título. Con el aumento de la capacidad de producción realizada durante 2020, en torno a un 20 % para cubrir la alta demanda de sus procesadores, Intel recuperó el título volviendo a ser el mayor fabricante de semiconductores del mundo.
Aun así, también lo ha recuperado debido a que el sector de los semiconductores redujo sus ingresos un 12 % en 2019 respecto a 2018, lo que situó el volumen de ventas en 419 000 millones de dólares. El motivo fue la bajada de precios de sectores en los que Intel no tiene presencia como el de la memoria de acceso aleatorio (RAM), y otros en los que tiene cierta presencia pero no importante, como el de la memoria NAND. Ambos sectores, NAND y RAM, vieron llegar a mínimos los precios de los chips.
Otros sectores de chips vieron aumentar sus ventas, como el de los chips de optoelectrónica con un 6.6 %, mientras otros como el destinado a productos analógicos se redujo un 5.1 %.
Vía: TechPowerUp.