AMD ha cambiado totalmente el rumbo de sus cuentas financieras en el último año habida cuenta del gran éxito que ha supuesto la serie de procesadores Ryzen 3000 de sobremesa. Eso ha hecho que en el primer trimestre de 2020 la compañía haya anunciado unos ingresos de 1790 millones de dólares, lo cual supone un fuerte aumento del 40 % respecto al mismo periodo de 2019.
Se ha beneficiado de la disminución del coste de comprar las obleas fabricadas con el proceso litográfico de 7 nm a TSMC, lo que ha hecho que también pase el margen bruto del 41 % al 46 % —la diferencia entre el precio al que compra los procesadores y al que los vende—. Los ingresos netos para el T1 2020 ha sido de 162 M$, lo cual es un incremento de 146 M$ ya que en el T1 2019 consiguió hacer solo 16 M$.
AMD ha indicado que han aumentado las ventas tanto de procesadores como de tarjetas gráficas, por lo que también ha experimentado un aumento de ventas de las Radeon. Esa división, la de Computación y Gráficos, han supuesto 1440 M$ de dólares de los ingresos totales, un 73 % más. Los ingresos de la división de Empresas, Embebidos y Semipersonalizados han supuesto 348 M$, un 21 % menos.
Vía: AMD.