AMD presentó hace unas semanas las dos primeras APU basadas en las arquitecturas Ryzen de procesadores y Vega de tarjetas gráficas, y no tienen mala pinta. En este caso, y como viene siendo habitual en las APU de AMD, no integran la memoria dentro del procesador y por tanto dependen de la memoria principal. De ahí que generalmente siempre se haya indicado que debe utilizarse la de mayor velocidad posible.
Sin sorpresas, las APU Ryzen y Vega tampoco integran memoria gráfica, y mucho menos HBM2, como ya indicó AMD en la presentación de estas APU, y pese a que algunos se echen las manos a la cabeza. Estos procesadores están formados por un único chip que integra en él la parte de CPU y GPU, pero no tienen un chip adicional de memoria como sí tiene el empaquetado multichip de los procesadores Kaby Lake G con chip gráfico dedicado Radeon.
Las imágenes siguientes son de un Ryzen 5 2500U, yson poco concluyentes con respecto a las características de la APU. Indica que usa 256 MB de memoria DDR4, y en ese momento funcionando a 400 MHz, y la APU está a 300 MHz. No recuerdo —y no puedo mirar ahora— si esos valores en Radeon Crimson ReLive son en vivo y significa que la APU está en reposo, o que usa una versión que no reconoce adecuadamente la APU. De todas formas, la cantidad de memoria gráfica supongo que se configurará en el BIOS o lo ajustarán los controladores en función de las necesidades de los programas a usar. En principio el Ryzen 5 2500U con una Vega 8 tendrá una potencia entre la 940MX y MX150.
Vía: Guru3D.